Sanitarios andaluces protestan porque la Junta no actualiza la bolsa de puntos desde 2019 y peligran sus opciones de contrato
La bolsa de trabajadores del Sistema Andaluz de Salud (SAS) sigue provocando quebraderos de cabeza entre los profesionales de la sanidad pública. Según ha podido saber elDiario.es Andalucía, las listas de méritos, que suman puntos en el currículum de una persona para que pueda acceder a un puesto de trabajo, no se han actualizado desde 2019 en 69 de las 116 categorías profesionales que hay en el SAS. Una situación que califican de “injusta” los afectados y que ha llevado a algunos a elevar quejas ante la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía.
El SAS lo admite, aunque se justifica explicando que “muchas categorías” se han actualizado a 31 de octubre de 2020, y que las que no lo han hecho, lo harán en los próximos meses. Sin embargo, por el camino se quedan miles de profesionales que no podrán optar a los contratos del próximo noviembre con el trabajo que han acumulado durante los dos últimos años porque Salud no ha actualizado sus puntuaciones. Una situación que afecta a varias especialidades médicas, perfiles de enfermería, todas las áreas técnicas salvo la de Farmacia y casi todo el personal administrativo de la sanidad pública andaluza.
Para entender la magnitud del problema, lo que ocurre es que una persona que haya trabajado durante la pandemia de la Covid-19 haciendo horas extra o exponiendo su salud y la de sus familias no tendrá reconocimiento por ello en cuanto a su posición en la bolsa de trabajo de su categoría. No tendrá reconocimiento porque puede ocurrirle que otro profesional que estuviera por delante en la lista de 2019 y que no haya trabajado en este año y medio, tenga más posibilidades de conseguir un contrato. Porque desde 2019 no se tiene en cuenta su desempeño laboral para las nuevas contrataciones que se vayan produciendo en los próximos meses.
Panorama “desalentador”
Esto afecta a profesionales del SAS de diferentes especialidades entre las que están algunas tan demandadas como cardiología, oftalmología o medicina intensiva, que es donde trabajan los sanitarios que han estado en cada unidad de cuidados intensivos de los hospitales andaluces. Mientras las estadísticas de contagios por coronavirus han llenado las salas de críticos de los centros hospitalarios y estos trabajadores luchaban en jornadas maratonianas, Salud no ha tenido tiempo aún para sumarle los puntos que les corresponden en la bolsa de empleo y algunos pueden verse superados en estas listas por otros compañeros que ya estuvieran en una posición mejor en 2019 aunque hayan acumulado menos horas de trabajo o méritos.
Según cifras del sindicato UGT, esta falta de actualización afecta a alrededor de 50.000 profesionales para los que los dos últimos años no se han contado. Un panorama “desalentador”, describen, sobre todo porque, precisamente por la pandemia, los puntos de méritos que podían lograr se han duplicado para premiarles por su sacrificio. Pero como no se les han sumado oficialmente, no sirven de nada en estos momentos.
Además, este problema con los baremos tiene una consecuencia inmediata en muchos profesionales que se pueden ver entre los 8.000 contratos de refuerzo durante la Covid-19 que no renovará el SAS a partir de noviembre. Ese es el caso de Mar, técnico en cuidados auxiliares de enfermería en Córdoba, que afirma que esta falta de actualización de los méritos la deja en la calle pese a haber trabajado durante los últimos meses. “8.000 trabajadores vamos al desempleo que supongo que eso será más caro para Andalucía que tenernos empleados con salario y trabajo”, sostiene.
Ella, como otros compañeros, ha elevado un escrito de queja ante el SAS para exigir que se arregle este problema. En su caso, las listas definitivas ya están en curso, pero pueden tardar aún dos meses en aprobarse, por lo que hasta 2022 no se le contarían los méritos acumulados a día de hoy. Además, reconoce que trabaja en Andalucía porque es la zona en la que vive pero que laboralmente ha estado mejor en el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha. En tierras manchegas estuvo trabajando 12 años.
Personal molesto
La puntuación de un sanitario o profesional del SAS en la bolsa de su categoría no solo sube en función de los méritos, sino también de la formación o la experiencia acumulada. Lo que se traduce en que, entre otras cosas, aprobar una OPE (oferta de empleo público) también suma puntos. Para aprobarlas, hay profesionales que optan por hacer cursos que ayudan a mejorar la puntuación y la posición en la lista. Sin embargo, como explica Marta, celadora asegura que en el SAS han hecho que cursos que duran 500 horas puntúen igual que otros de apenas 120. “Yo que he hecho muchas horas, he tirado el dinero para nada”.
Por otra parte, como las agencias sanitarias se están extinguiendo y el SAS va a asumir a sus trabajadores, hay inquietud entre los profesionales que no tienen sus listas actualizadas. “Algunos de los que están en las agencias nos adelantarán en puntos cuando no debería ser así”, lamenta Marta. Una realidad que para sindicatos como UGT se explica porque la Consejería de Salud no contrata a personal suficiente en ningún ámbito, ni para la atención de los pacientes ni para baremar las listas.
Antonio Macías, portavoz de UGT, cree que este problema se ha agravado por “la falta de personal que ha habido durante la pandemia y que se ha tenido que dedicar a cuestiones asistenciales”. Lo que se traduce en que, sin las listas actualizadas, “algunos salen muy perjudicados, ya no solo los despiden, sino que pueden no coger contratos o pillar alguno muy lejos de donde podrían tenerlo con una bolsa actualizada”. Inmaculada Giménez, de CCOO, es mucho más tajante al respecto y dice que el “SAS no tiene un duro y han gestionado fatal”.
“Los profesionales se están yendo”, añade la portavoz de Comisiones Obreras. Por su parte, Fayna Gómez del sindicato de Enfermería SATSE cree que el futuro no es halagüeño en estas circunstancias: “No solo se quedan trabajadores en el paro, sino que la precariedad e inestabilidad en los contratos hacen que las enfermeras no puedan dar cuidados de calidad, no saben de un contrato a otro a qué pacientes van a tener y esto atenta contra su seguridad y produce un gran estrés en los profesionales”.
“Las listas no se usan”
Por su parte, Paco Cantalejo del Sindicato Médico considera que el problema con las listas es solo una anécdota porque “hace años que no se usan en realidad”. El galeno es claro al asegurar que existen “los llamados listados adicionales en los que se apunta la gente conforme se va terminando y con unos criterios no consensuados, te van llamando”. Victorino Girela de CSIF considera que las categorías que están sin actualizar son “muy importantes” ya que afectan a “mucho personal”. “Se les va a perjudicar ahora de una manera increíble porque se les va a negar un contrato porque todos los puntos que podría sumar con la nueva baremación no estarán en vigor. Seguimos con este problema desde hace 15 años y en algunos casos peor”.
Como solución, en CSIF proponen incorporar a personal jubilado o personal liberado para que se dedique exclusivamente a la baremación. Como alternativa, el SAS ofrecerá contratos cortos (seis meses) para que los profesionales puedan seguir trabajando y esperará a que se hayan actualizado todas las bolsas para empezar a ofertar vinculaciones largas e interinidades. Las fuentes oficiales del SAS consultadas insisten en que hay categorías en las que llega a haber 500.000 personas inscritas en la bolsa y que la baremación “lleva su tiempo”. “Este decalaje siempre se ha dado”, sentencian.
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