La consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, ha asegurado que el certificado COVID es un “incentivo” para la vacunación, que es la “solución definitiva” para acabar con la séptima ola de contagios que atraviesa la comunidad autónoma. El Ejecutivo regional está a la espera de que se pronuncie el Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) sobre su petición para poder exigir el pasaporte COVID a mayores de 12 años para acceder a celebraciones de todo tipo, al ocio nocturno y a cualquier evento que congregue a más de 500 personas en interiores o mil en exteriores.
Repollés ha comentado que esta sería una medida que permitiría “crear espacios de baja contagiosidad, y ”continuar con una actividad social y económica medianamente normal“. Si el TSJA no autorizara esta demanda, el Gobierno de Aragón seguiría ”explorando todas las herramientas jurídicas para intentar conseguir que esta posibilidad de ligar las celebraciones y reuniones siga siendo exigible“, ha reiterado Repollés, apuntado que no se estudian restricciones en sectores económicos como en anteriores ocasiones.
La titular de Sanidad ha hecho estas declaraciones este domingo tras participar en el acto académico con motivo del Día de la Patrona del Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza. “Si conseguimos que se vacunen los no vacunados, será suficiente. Seguiremos insistiendo en que la solución es la vacunación y las medidas de higiene”, ha añadido Repollés.
La consejera ha subrayado que la vacuna contra el coronavirus “funciona y es la solución”, y lo han comprobado desde su Departamento con un análisis estadístico: “Una persona que no está vacunada tiene nueve veces más posibilidades de ingresar en la UCI que una persona vacunada. Esto es una realidad. El porcentaje que hay en la UCI de no vacunados respecto a los vacunados es muy superior, y esto nos hace remarcar que la población se tiene que vacunar para acabar con la pandemia”.
En esta línea, Repollés ha recordado que la dosis contra la covid-19 “protege de la enfermedad grave y de la muerte” y ha dicho que en Aragón gracias a la vacunación se han evitado 1.300 muertes respecto a la época en la que a la población no se le había vacunado. La consejera también ha explicado que la región registra la séptima ola epidémica, donde “se ha visto un incremento acusado en los últimos días” pero en la que la repercusión hospitalaria va a ser menor.
La localidad de más de 10.000 habitantes con mayor número de casos es Jaca, que registra una incidencia acumulada de 495,1 casos por cada 100.000 habitantes a siete días. Repollés ha detallado que en los últimos días se ha producido “una frenada” en el ascenso de contagios y “posiblemente empiecen a descender estos días”. No obstante, “seguimos preocupados y vigilantes de todas las localidades que tengan una incidencia superior”, ha apostillado.
Por último, la consejera de Sanidad ha esgrimido que si la Agencia Europea del Medicamento (EMA) da el visto bueno a la vacunación de los niños de entre seis y once años y así se aprueba en la Ponencia de Vacunas, Aragón tiene las herramientas para hacerlo.