El festival 'Tsunami Xixón' se celebra encima de un pozo de tormentas, un lugar diseñado para recoger las aguas que caen de manera torrencial y evitar que la ciudad asturiana se inunde. Pero la reunión de los organizadores con Vox en su sede de Gijón desató un vendaval de críticas que no había pozo que parara y obligó al festival de rock a salir en defensa de la libertad de expresión y contra la censura, con la icónica banda asturiana Desakato como abanderados en la primera de la tres jornadas del festival gijonés.
En el último concierto en su tierra natal, se separarán en otoño tras 20 años de carrera, Desakato elevó los decibelios, también de forma literal, y se pronunció contra el fascismo -“ni un paso atrás”- y a favor de la oficialidad del asturiano, que Vox pretendía vetar en los actos culturales de Gijón.
En el concierto de casi dos horas de los de Llanera se subieron al escenario dos pancartas, una con el lema 'Asturies feminista y antifascista' y una segunda reclamando 'Oficialida' de la Xunta pola Defensa de la Llingua Asturiana. Las canciones en la llingua fueron algunos de los momentos más emotivos de su energético y celebrado concierto, que incluyó el estreno en directo de un tema contra el fascismo y Vox. El grupo burgalés La M.O.D.A., otro de los platos fuertes del jueves, también se sumó en su corto pero intenso concierto a favor de la oficialidad del asturiano y de la libertad de expresión puestas en cuestión en las últimas semanas.
Acompañados en el escenario en varias ocasiones por miembros del equipo técnico las canciones en asturiano fueron puntos álgidos del concierto del grupo formado por Pablo, Pepo, Gabri, Falu y Mario. La contundencia de su sonido no fue un contrapunto a la emotividad que la formación dejó ver en los últimos momentos de su concierto, el último en su tierra natal. Desakato culminará su existencia el próximo mes de noviembre con un concierto en el Wizink Center de Madrid.
Vox contra el asturiano
La polémica festivalera viene desde el momento en que Gijón nombra alcaldesa de nuevo a Carmen Moriyón gracias a un acuerdo de gobierno con PP y Vox. Moriyón fue alcaldesa ya de la ciudad asturiana entre 2011 y 2019 y ha vuelto al cargo siendo una de las pocas supervivientes en activo de la mítica foto de Colón de la derecha española de febrero de 2019. Moriyón es la líder del partido Foro, que repudió, y denunció por robar, a su fundador Francisco Álvarez Cascos, y llegó a asegurar que jamás pactaría con Vox tras un ataque del partido de extrema derecha precisamente por la oficialidá del asturiano. Pero al igual que la presidenta extremeña María Guardiola, se acabó pactando con Vox otorgándoles además la concejalía de Festejos, clave en la ciudad y que controla además la cultura.
La nueva concejala de Festejos, Sara Álvarez-Rouco, no tardó en generar su primera polémica anunciando vetos contra los actos culturales en asturiano, generando una oleada de críticas que la propia alcaldesa Moriyón tuvo que salir a contener. Grupos como Desakato, Mala Reputación y Misiva, reconocieron que se replantearon tocar en Xixón ante este ataque pero se mantuvieron para “nun permitir que consigan callanos”.
La reunión del equipo directivo del festival 'Tsunami Xixón' en la sede de Vox en Asturias provocó duras críticas en redes sociales. Los promotores defendieron la necesidad de reunirse con las instituciones de las que dependen sus autorizaciones, y patrocinios, y en un comunicado reafirmaron el espíritu del festival “totalmente a favor de la libertad de expresión y en contra de que se utilice de forma partidista o electoral”. La autorización del festival depende de la entidad Divertia, ahora gestionada por Vox, que
Este viernes Dropkick Murphys y Lendakaris Muertos encabezan el cartel del 'Tsunami Xixón' a la espera de la traca final del sábado con El Drogas, Hellacopters e Ilegales como grupos estrella con los que rematar un festival al que este año el pozo de tormentas le viene mejor que nunca para evacuar cualquier polémica.