Ramírez descarta vender jugadores importantes en enero

Miguel Ángel Ramírez, junto a los jugadores canarios de la UD Las Palmas

EFE

Las Palmas de Gran Canaria —

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El presidente de la UD Las Palmas, Miguel Ángel Ramírez, ha manifestado este miércoles que el club no tiene intención de desprenderse en enero de ninguno de sus futbolistas importantes, y supedita otros posibles movimientos en el próximo mercado de fichajes, tanto de altas como de bajas, a si el equipo amarillo sigue adelante o no en la Copa del Rey.

El dirigente grancanario ha dicho en una rueda de prensa posterior a la celebración de las juntas ordinaria y extraordinaria de la entidad que si el conjunto isleño cayese en dieciseisavos de final ante el Elche, el próximo 5 de enero, tendría una plantilla demasiado amplia para una sola competición como LaLiga EA Sports, pero ha admitido que su deseo es superar esa ronda y seguir contando con todos los jugadores.

Ramírez ha negado un presunto interés del Arsenal inglés por el centrocampista Alberto Moleiro, con contrato hasta 2026, al tiempo que descarta también que en enero pueda ser repescado el delantero portugués Fábio Silva por el Wolverhampton Wanderers, club que lo cedió el pasado verano.

Sí que ha reconocido el mandatario de la UD que tanto él como su compatriota Dário Essugo probablemente no estarán la próxima temporada en la Unión Deportiva dado el excelente rendimiento que han ofrecido, por lo que entiende que será imposible retenerles. Por el contrario, da casi por hecha la renovación del polivalente medio Javi Muñoz, cuyo contrato vence en junio de 2025.

Preguntado por el entrenador, Diego Martínez, ha revelado que el técnico gallego tiene “cláusula de rescisión” que debería abonar para romper su contrato, cuya duración es de una temporada más otra opcional en caso de conseguir la permanencia.

Ramírez se ha mostrado “muy satisfecho” tanto por el rendimiento deportivo del equipo como por la situación económica de la entidad, que ha aprobado las cuentas de la temporada anterior con más de 1,3 millones de euros netos de beneficio, y prevé al término de la actual campaña 2024-2025 otro superávit, de entre cuatro y cinco millones.

“Mantener la categoría la temporada anterior y haberle dado la vuelta a la situación económica, es un orgullo”, ha subrayado en relación a los doce millones de euros de pérdidas que tuvo la entidad tras conseguir el ascenso a Primera División, al tener que acometer el pago de primas a jugadores de la plantilla y a otros clubes.

Ramírez ha afirmado que el mejor día de 2024 que está a punto de finalizar fue cuando lograron la permanencia matemática con un empate sin goles en Cádiz, en la penúltima jornada del curso anterior.

“La prioridad es conseguir la estabilidad del equipo en Primera División y estamos en el camino correcto. Hemos revertido entre todos una mala situación y ahora tenemos una mayor tranquilidad, pero ni de lejos es cómoda, no nos podemos dormir hasta conseguir los 40 puntos”, ha recalcado.

Respecto de la situación del guardameta sevillano Álvaro Valles, relegado a la grada por no querer renovar su contrato que expira en junio de 2025, Ramírez ha dicho que no se arrepiente de la decisión tomada, y ha asegurado que hay “cordialidad” entre ambas partes, además de subrayar que están “encantados” con los porteros extranjeros fichados para esta temporada, Cillessen y Horkas.

Por otro lado, cuestionado por la situación del CD Tenerife, que en la noche del martes modificó su consejo de administración, el presidente de la UD Las Palmas le ha deseado “lo mejor” y ha señalado que han dado “un paso adelante”, por lo que espera que ahora les acompañen también los resultados deportivos.

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