El Kalise Gran Canaria quiere apurar este domingo sus opciones a “play-off” en la cancha del Ricoh Manresa, en la que debe ganar para presionar al octavo clasificado de la fase regular de la Liga, el equipo catalán Akasvayu Girona.
Los pupilos de Salva Maldonado, que sólo han podido ganar esta temporada ACB en el feudo del sevillano Cajasol, se han conjurado para que el Manresa pague los platos de un decepcionante arranque en los octavos de final de la europea Copa Uleb, ya que perdieron el pasado martes por 25 puntos en la cancha del turco Galatasaray.
Un triunfo del Kalise inyectaría moral, autoestima y convicciones para intentar la proeza de la remontada en el choque de vuelta con los otomanos, que se jugará el 18 de marzo en la isla.
Maldonado no dio prioridad a uno de estos próximos partidos -“queremos ganar tanto el domingo como el martes”-, pero reconoció que nunca es fácil la sorpresa en Manresa -“es un equipo muy parecido al nuestro, que se hace fuerte en casa”- y que en la Copa Uleb 25 puntos -“es un lastre impensable para remontar”-.
Los partidos Manresa-Gran Canaria se han vivido en quince ocasiones en la ACB y los anfitriones lo han ganado en doce. Sin embargo, los canarios han salido airosos en dos de sus tres últimas visitas y, en la más recientes, en diciembre de 2005, se impuso por 64-67. Además, en la primera vuelta, el Kalise venció por 83-78.
Tras reclamar concentración a los suyos de principio a fin, Maldonado recordó que visitarán una de las pistas más complicadas de la elite española: “El Manresa tiene un conjunto muy ofensivo, que se conoce mucho y, además, está necesitado porque los de abajo están pisando fuerte. Para ganar tenemos que parecernos más al equipo que se enfrentó al Granada que el de Turquía”.