Las aficiones del Unicaja y el Baskonia dan colorido a las gradas del Gran Canaria Arena
Gente con pelucas, jeques árabes, azafatos, plátanos, flamencas o pollos se camuflaron entre los aficionados que acudieron al Gran Canaria Arena a disfrutar de la primera jornada de la Copa del Rey en la que el Barcelona y el Unicaja se metieron en la primera semifinal tras eliminar al Valencia y al Bilbao Basket, respectivamente. Y es que la Copa este año es Carnaval y los espectadores no desaprovecharon la oportunidad
El videomarcador del millón y medio de euros sirvió para entretener a las ocho aficiones desplazadas hasta la Isla a las que esperaba la marea amarilla poblando la parte superior de los anillos del pabellón. En la enorme pantalla la organización entretuvo en los tiempos muertos a los espectadores con la kiss-cam y los bongos. Con la primera hasta el presidente del Club Baloncesto Gran Canaria tuvo que darle un beso a su acompañante. También hubo diversión en el parqué, aparte del partido, ya que uno de los patrocinadores del torneo tenía preparado algunos concursos, como una partida de bolos en las que había que tirar dos bolos con una bola gigante en la que dentro estaban dos aficionados del Valencia y el conjunto catalán, u otro en el que dos dos niños tenían que vestirse con la ropa de un jugador y encestar una canasta.
Sobre todo fue de alabar la afición del Baskonia, equipo que no se clasificó para la Copa del Rey pero que dio el mayor colorido al primer partido del torneo. Los 300 aficionados vitorianos, ataviados con su camiseta azulgrana y acompañados de una charanga poblaron de cánticos el Gran Canaria Arena, mientras que el Barça y el Valencia luchaban en el parqué para ver qué equipo se metía en la primera semifinal. Entre los cánticos que realizaron, el recuerdo a su Baskonia, pero también animaron a los taronjas que estuvieron a remolque en el encuentro aunque pelearon hasta el final. Precisamente con los aficionados de este club, sentados su lado, se “enfadaron” al ver cómo no confiaban en la remontada y no se levantaban de sus asientos, aunque finalmente le lograron sacar unos cánticos de “Valencia, Valencia”, aunque los barcelonistas finalmente se llevaron un reñido encuentro. En el otro lado del pabellón se situaban los aficionados del Barça, quienes no pararon de realizar vítores todo el rato a favor de su equipo y, como no, de la independencia de Cataluña, los cuales eran silbados por el resto del Gran Canaria Arena.
En el descanso entre el primer y el segundo encuentro, los aficionados del Unicaja comenzaron a calentar sus gargantas y realizaron sus cánticos dirigidos por su propia charanga, aunque la del Baskonia daba sus últimos coletazos antes de dar el protagonismo a los malagueños quienes alentaron a su club todo el rato, aunque los seguidores de los hombres de negro también se hacían oír con su “que bote Miribilla” y, sobre todo, el “sí se puede” y “échale huevos”, ya que en los instantes finales los de Sito Alonso se acercaron en el marcador, aunque al final el líder de la ACB certificó su pase a semifinales (86-78) mientras el sector de los boquerones entonaban el “a por el Barça”.
Por su parte, los aficionados del Gran Canaria estuvieron discretos y no animaron mucho, sus gargantas las guardan para el partido que celebrarán este viernes a las 20.30 horas ante el Joventut, donde seguro que la mayor parte de los espectadores del Gran Canaria Arena se pondrán de parte de los de Aíto García Reneses. De hecho, ya se entonó algún pío pío y el resto de la grada aprendió la lección. Este viernes la adrenalina del baloncesto seguirá corriendo por las arterias de Siete Palmas.