Espacio de opinión de Canarias Ahora
El lenguaje interventor se ha puesto de moda por Rafael Medina Jaber
Hasta hace poco, este modismo era impensable y en muchos casos denostados, ¿Serán síntomas de que las cosas no andan muy bien?
Palabras, conceptos, definiciones, términos, todos los días asoman en cualquier medio de comunicación, en cualquier tertulia, en cualquier debate político, cargado de términos como déficit, supervisión, autorizaciones de créditos, transferencias, variaciones de gastos e ingresos, excesos de gastos, seguimiento de créditos, ajustes, recortes, insolvencias, liquidez, conceptos que, quizás utilizados con mejor pericia, tradicionalmente han sido las herramientas y el quehacer de otro ámbito muy distinto, el de la función contable interventora y presupuestaria, ,encontrándonos que en estos momentos se han trasladado de una forma vertiginosa a otros espacios y lo mas sorprendente es que se emplean con rotundidad aunque no duren en el tiempo ni diez minutos.
Ya que la modernidad va por ahí y el discurso político es tan fugaz que no aguanta ni horas en vigor, seria interesante hacer una pequeña reflexión.
Tengo la impresión de que el mundo gira nucleado por el registro contable, es impresionante, registros que se anotan a tal velocidad que los ordenadores pasan apuros.
Los hechos económicos y financieros que se están produciendo, en muchos casos aderezados con cambios de valores y criterios por acuerdos o decisiones políticas, unido al absurdo de invertir el fin de las cosas, póngase de ejemplo, la cantidad de viviendas o locales de negocio que han terminado sirviendo para adornar los activos de los balances con valores dudosos y la paradoja de numerosas familias, en muchos casos sin tener donde habitar.
Esta moda de reducirlo todo al lenguaje del registro nos obliga a pensar de esta forma y así poder tomar decisiones Políticas.
Haciendo un ejercicio de simplificación y basándonos en una arquitectura jurídica que tiene como marco la Constitución y que constituye la estructura del estado de derecho ( Leyes laborales, fiscales, mercantiles administrativas, financieras, sanitarias, etc.) podríamos definir los Presupuestos de Gastos de las AAPP como el importe máximo que el Parlamento autoriza a los Gobiernos a contraer obligaciones que dan lugar derechos a terceros, Estas Obligaciones y derechos de terceros, sorprendentemente se están desconsolidando en todas direcciones a excepción de una sola de ellas, la llamada deuda publica, así que podemos concluir que se ha creado una categoría jurídica diferenciada del resto por decisiones ordinarias y no por alteración del rango jurídico .
Así y de forma descriptiva y simplificando, los gastos de las AAPP se clasifican desde el punto de vista económico en grandes apartados que permiten cumplir con obligaciones a terceros, por ejemplo el capitulo primero es para pagar las retribuciones por el trabajo del personal al servicio del sector publico tales como policías locales y nacionales, guardia civil, médicos, enfermeros, ATS, arquitectos, jueces, ingenieros de obras publicas, de comunicaciones, agrícolas, aparejadores, bomberos, parlamentarios, Casa real, peritos, controladores aéreos, militares, cuerpos especiales, secretarios judiciales, veterinarios, paracaidistas, concejales, consejeros de cabildos, de diputaciones, interventores, administradores financieros y tributarios, administradores generales, secretarios de AALL, altos cargos no electos, consejeros de gobierno, de órganos de control externo, de consejos consultivos, diputado del común, maestros. Profesores catedráticos, biólogos, etc?, Tal y como estamos viendo, las decisiones políticas van dirigidas a recortar derechos de forma intensa y en muchos casos radical al perder el empleo y, ello ¿en base a que?, a las necesidades del País.
Siguiendo con la descripción de los presupuestos de forma sencilla los capítulos 2-4-5-6-7 dan cobertura a obligaciones que responden a derechos de actividades, empresas,compañías, etc? que tienen como fin negocios dedicados a la venta de alimentos,utensilios, materias primas, materiales de producción de diferentes sectores, construcción combustible, material de oficina,mercancía diversa, servicio de todo tipo,, asistencia técnica, arrendamientos, servicios informáticos, prensa, publicidad, revistas, servicios de ambulancia, servicios a los hospitales, a educación,, empresas promotoras de obras, inmobiliarias, empresas de todos los sectores productivos de la economía real, subvenciones, ayudas ala población y a las empresas, transferencia a las AAPP, universidades, etc?. Pensiones, subsidios de todo tipo? A todo este conjunto diverso de entidades, empresas y personas también les está afectando de forma importante y en muchos casos definitiva la disminución de sus registros en cuenta o su desaparición y, ello ¿en base a que?, a las necesidades del País.
Finalmente nos queda por describir dos capítulos que son los bendecidos por esta nueva época que vivimos, el 3 y el 9. Estos capítulos dan cobertura a obligaciones que responden a derechos generados por intereses de préstamos y deuda publica así como a todo tipo de pasivos financieros del sector publico y a la devolución de los mismos.
Estos capítulos recogen en sus presupuestos los créditos para hacer frente a la tan temida y famosa Prima de Riesgos de los Países, y a la Deuda Soberana. En este caso los Registros Contables no solo no disminuyen sino que aumentan de forma considerable. Estos son los intocables de la nueva época, los grandes beneficiarios de la modernidad y, ello ¿en base a que?, a las necesidades del País.
Llegados a este punto y desde esta perspectiva se ve con claridad que a lo tonto se nos ha colado una categoría jurídica que da supremacía al ordenamiento jurídico financiero sobre el resto, por decisiones y voluntad de algunos, y no por alteración del rango normativo, dejando al resto?.. como categorías menores y en algunos casos hasta marginales.
Pues bien habrá que darle la vuelta a la situación y desde la modernidad del registro contable y las valoraciones, orientar las decisiones para que disminuyan el sufrimiento de las personas que lo están padeciendo.
Por todo ello y sin inventar mucho, quizás copiando bastante de otras partes del Mundo, habrá que invertir la dinámica, que en lugar de ir hacia atrás marche hacia delante, ya sea utilizando la técnica al recurso? o cualquier otra o bien reformulando los estados económicos y financieros de las familias y de las empresas y no solo las de los llamados Mercados, para poder alcanzar un nuevo equilibrio que ponga en marcha la actividad de toda la sociedad no solo una parte de ella por muy importante que pueda parecer en un momento determinado.
*Ex presidente de la Audiencia de Cuentas de Canarias
Rafael Medina Jaber*
Hasta hace poco, este modismo era impensable y en muchos casos denostados, ¿Serán síntomas de que las cosas no andan muy bien?
Palabras, conceptos, definiciones, términos, todos los días asoman en cualquier medio de comunicación, en cualquier tertulia, en cualquier debate político, cargado de términos como déficit, supervisión, autorizaciones de créditos, transferencias, variaciones de gastos e ingresos, excesos de gastos, seguimiento de créditos, ajustes, recortes, insolvencias, liquidez, conceptos que, quizás utilizados con mejor pericia, tradicionalmente han sido las herramientas y el quehacer de otro ámbito muy distinto, el de la función contable interventora y presupuestaria, ,encontrándonos que en estos momentos se han trasladado de una forma vertiginosa a otros espacios y lo mas sorprendente es que se emplean con rotundidad aunque no duren en el tiempo ni diez minutos.