Preocupaciones equivocadas

Y mientras el PP, o sea, Soria, anda en estas cosas, que se le han ocurrido a él solito sin viaje al salmón mediante, Paulino sigue dando la vara de la Policía Autonómica y ahora está por limitar la compra de una segunda casa también a los canarios, no vayan a pisotearle el ápice. Entre esto y las medidas económicas de choque, además de la que se traen con el sí pero no de las subvenciones a los hipotecados, la llevamos clara.

Los psocialistas, por su parte, dicen que todo, empezando por el cambio a la barra libre sin ápice de las directrices, es una cortina de humo, maniobras de distracción, mera propaganda y una muestra más de desgobierno, extremo éste porque el intento de favorecer a los intereses que construirán sin toca el ápice no es, propiamente, desgobierno, sino una forma de gobernar.

El caso es que cansan, los condenados. Se repiten e intenta una y otra vez las mismas jugadas. De lo que no hablan, para nada, es del incremento del paro y de los índices de pobreza. Respecto a los segundos, no sé qué lugar ocuparemos en el ranking nacional, cabe suponerlo. En cuanto al paro, Canarias es la comunidad en que más subió durante abril. Gana en esto la provincia de Las Palmas y siguen sin insularizar los datos en atención a que la marcha del empleo en una isla no es igual en las restantes por lo que las cifras absolutas y las medias porcentuales no reflejan lo que ocurre en cada una de ellas. Pero esto, ya saben, no es asunto que preocupe al Gobierno: si la cosa se pone más fea de lo que está, se le echa la culpa a Zapatero y asunto solucionado.

Y mientras el PP, o sea, Soria, anda en estas cosas, que se le han ocurrido a él solito sin viaje al salmón mediante, Paulino sigue dando la vara de la Policía Autonómica y ahora está por limitar la compra de una segunda casa también a los canarios, no vayan a pisotearle el ápice. Entre esto y las medidas económicas de choque, además de la que se traen con el sí pero no de las subvenciones a los hipotecados, la llevamos clara.

Los psocialistas, por su parte, dicen que todo, empezando por el cambio a la barra libre sin ápice de las directrices, es una cortina de humo, maniobras de distracción, mera propaganda y una muestra más de desgobierno, extremo éste porque el intento de favorecer a los intereses que construirán sin toca el ápice no es, propiamente, desgobierno, sino una forma de gobernar.