El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Arnaiz se reubica
Jose Manuel Arnaiz remitió un escrito en la primera semana de este mes de julio solicitando su reincorporación a su trabajo de ingeniero. Ya huele su despido y va coloreando su futuro inmediato de la forma que más le conviene y que avalan sus derechos consolidados. Será un adiós triste el de Arnaiz, quizá el presidente portuario más títere que haya habido nunca. Por ese resquicio puede colarse en la historia. Además podemos contarles del todavía presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, que no se va de vacaciones. Se va a quedar a sudar la camisa este agosto para sacar adelante el plan de empresa. Todo un gesto si no fuera por todo lo demás. A lo mejor estas poses puntúan en la liquidación ulterior, dicho sea con la malicia con que puede tratarse al árbol que ya serrado se va inclinando con lentitud, pero con la seguridad que otorga la gravedad -la de Newton-. Sin abandonar el puerto, ya les podemos ir avisando de quién sería el sustituto de Arnaiz, si sólo dependiera de la opinión de José Miguel Pérez: Augusto Brito. Dicho está.
Jose Manuel Arnaiz remitió un escrito en la primera semana de este mes de julio solicitando su reincorporación a su trabajo de ingeniero. Ya huele su despido y va coloreando su futuro inmediato de la forma que más le conviene y que avalan sus derechos consolidados. Será un adiós triste el de Arnaiz, quizá el presidente portuario más títere que haya habido nunca. Por ese resquicio puede colarse en la historia. Además podemos contarles del todavía presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, que no se va de vacaciones. Se va a quedar a sudar la camisa este agosto para sacar adelante el plan de empresa. Todo un gesto si no fuera por todo lo demás. A lo mejor estas poses puntúan en la liquidación ulterior, dicho sea con la malicia con que puede tratarse al árbol que ya serrado se va inclinando con lentitud, pero con la seguridad que otorga la gravedad -la de Newton-. Sin abandonar el puerto, ya les podemos ir avisando de quién sería el sustituto de Arnaiz, si sólo dependiera de la opinión de José Miguel Pérez: Augusto Brito. Dicho está.