Se enteró el marqués

Pocas cosas ocurren en Fuerteventura de las que no tenga casi inmediato conocimiento el marqués de Corralejo, también conocido como Domingo González Arroyo. Acaba de ser elegido por abrumadora mayoría, es decir, a la búlgara, presidente del Partido Popular majorero, bien por el carisma con que la naturaleza le ha dotado, bien por los favores y prebendas repartidos, o bien, por la inmensa cantidad de información que maneja. De ahí que el incidente del ordeño nocturno descubierto por agentes de la Policía Local le viniera de perlas ya que uno de los dos protagonistas del acontecimiento es destacado militante del PP y no precisamente de la cuerda del marqués. De este modo el hombre tuvo un congreso tranquilo, los amantes enlatados un susto de muerte y Fuerteventura una interesante historia que contar. No está mal para unas blancas navidades donde nunca nieva. De aquella manera, claro.

Pocas cosas ocurren en Fuerteventura de las que no tenga casi inmediato conocimiento el marqués de Corralejo, también conocido como Domingo González Arroyo. Acaba de ser elegido por abrumadora mayoría, es decir, a la búlgara, presidente del Partido Popular majorero, bien por el carisma con que la naturaleza le ha dotado, bien por los favores y prebendas repartidos, o bien, por la inmensa cantidad de información que maneja. De ahí que el incidente del ordeño nocturno descubierto por agentes de la Policía Local le viniera de perlas ya que uno de los dos protagonistas del acontecimiento es destacado militante del PP y no precisamente de la cuerda del marqués. De este modo el hombre tuvo un congreso tranquilo, los amantes enlatados un susto de muerte y Fuerteventura una interesante historia que contar. No está mal para unas blancas navidades donde nunca nieva. De aquella manera, claro.