El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Siete estrellas verdes en Teguise
Se quedó pasmado un lector que el pasado fin de semana acudió a la Villa de Teguise, en Lanzarote, con motivo de la celebración del Concurso de Coplas Guanapay en el Convento de Santo Domingo, que está al lado de la sede del Ayuntamiento. Al salir del espectáculo nuestro hombre miró para las ondeantes banderas que estaban en la fachada del edificio consistorial y contempló claramente la presencia de las enseñas de Europa y España, junto a una tercera, bastante desteñida, en la que se podían distinguir tres colores y siete estrellas verdes. Corrió raudo y veloz al Estatuto de Autonomía y a repasar los últimos quinientos boletines oficiales de Canarias y no encontró que alguien haya cambiado la bandera canaria, con escudo o sin él, por la bandera con siete estrellas verdes. Su conclusión fue muy clara: será que han dado libertad a los alcaldes para que coloquen el paño que deseen, ora la bandera pirata, con calavera y dos tibias, ora la del movimiento gay y, en los días grandes del pueblo, la del partido del alcalde, a falta de una con el escudo heráldico de la familia del regidor.
Se quedó pasmado un lector que el pasado fin de semana acudió a la Villa de Teguise, en Lanzarote, con motivo de la celebración del Concurso de Coplas Guanapay en el Convento de Santo Domingo, que está al lado de la sede del Ayuntamiento. Al salir del espectáculo nuestro hombre miró para las ondeantes banderas que estaban en la fachada del edificio consistorial y contempló claramente la presencia de las enseñas de Europa y España, junto a una tercera, bastante desteñida, en la que se podían distinguir tres colores y siete estrellas verdes. Corrió raudo y veloz al Estatuto de Autonomía y a repasar los últimos quinientos boletines oficiales de Canarias y no encontró que alguien haya cambiado la bandera canaria, con escudo o sin él, por la bandera con siete estrellas verdes. Su conclusión fue muy clara: será que han dado libertad a los alcaldes para que coloquen el paño que deseen, ora la bandera pirata, con calavera y dos tibias, ora la del movimiento gay y, en los días grandes del pueblo, la del partido del alcalde, a falta de una con el escudo heráldico de la familia del regidor.