El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Unos neumáticos para el Lexus negro
Parece mentira, con todo lo que se gastan en cenas, asaderos y condumios varios; con todo lo que se les va en abogados y viajes al Sur de Marruecos; con todo lo que gastan en personal de confianza, el que se queda y el que sale por patas, no tiene dinero la Cámara de Comercio de Las Palmas para velar por la integridad física de su presidente, el honorable José Miguel Suárez Gil. El flamante y solemne coche oficial que utiliza para sus desplazamientos, un imponente Lexus de color negro con los cristales más negros todavía, tiene los neumáticos delanteros con las verguillas por fuera, es decir, desgastados al máximo. No nos podemos creer que el problema esté en la titularidad del vehículo, que viene heredado de anteriores y también honorables etapas plateadas, pero si el asunto es puramente económico, que Vultesa le regale un juego de ruedas. Y todo quedará entre presidentes camerales.
Parece mentira, con todo lo que se gastan en cenas, asaderos y condumios varios; con todo lo que se les va en abogados y viajes al Sur de Marruecos; con todo lo que gastan en personal de confianza, el que se queda y el que sale por patas, no tiene dinero la Cámara de Comercio de Las Palmas para velar por la integridad física de su presidente, el honorable José Miguel Suárez Gil. El flamante y solemne coche oficial que utiliza para sus desplazamientos, un imponente Lexus de color negro con los cristales más negros todavía, tiene los neumáticos delanteros con las verguillas por fuera, es decir, desgastados al máximo. No nos podemos creer que el problema esté en la titularidad del vehículo, que viene heredado de anteriores y también honorables etapas plateadas, pero si el asunto es puramente económico, que Vultesa le regale un juego de ruedas. Y todo quedará entre presidentes camerales.