Otros se quedarán dentro

Como les decíamos antes, del PSC no se marcharán todos los cabreados. Muchos que son socialistas convencidos se van a quedar luchando por sus convicciones desde dentro, tratando de explotar la vía del reconocimiento judicial al atropello del que se consideran víctimas. En ese grupo de veteranos militantes podemos encuadrar a Santiago Pérez o a Pedro Anatael Meneses, que se quedan dolidos y tristes, pero se quedan. Esperarán a que amaine la tormenta o a que un juez les de la razón en sus planteamientos. No quieren saber nada de presentarse a las elecciones y son conscientes del daño que entre todos se ha infligido al PSC en la isla. Luego están los Eligios, que necesitan que se les siga considerando socialistas para, desde esa posición, defender los planteamientos más derechosos del mercado y colocarse cerca del poder, sea del signo que sea, que emane del 22 de mayo. A partir de ahora asistiremos, sin duda, a un goteo importante de militantes, pero ya verán que habrá muy pocos con suficiente renombre como para entusiasmar a ninguna asociación política de postín. Desde la dirección del PSC se lanzan mensajes de tranquilidad y de confianza en el electorado progresista, aún a sabiendas de que el daño se apreciará más en Santa Cruz que en el resto de la isla.

Como les decíamos antes, del PSC no se marcharán todos los cabreados. Muchos que son socialistas convencidos se van a quedar luchando por sus convicciones desde dentro, tratando de explotar la vía del reconocimiento judicial al atropello del que se consideran víctimas. En ese grupo de veteranos militantes podemos encuadrar a Santiago Pérez o a Pedro Anatael Meneses, que se quedan dolidos y tristes, pero se quedan. Esperarán a que amaine la tormenta o a que un juez les de la razón en sus planteamientos. No quieren saber nada de presentarse a las elecciones y son conscientes del daño que entre todos se ha infligido al PSC en la isla. Luego están los Eligios, que necesitan que se les siga considerando socialistas para, desde esa posición, defender los planteamientos más derechosos del mercado y colocarse cerca del poder, sea del signo que sea, que emane del 22 de mayo. A partir de ahora asistiremos, sin duda, a un goteo importante de militantes, pero ya verán que habrá muy pocos con suficiente renombre como para entusiasmar a ninguna asociación política de postín. Desde la dirección del PSC se lanzan mensajes de tranquilidad y de confianza en el electorado progresista, aún a sabiendas de que el daño se apreciará más en Santa Cruz que en el resto de la isla.