Un ganadero de Arucas, Antonio Pérez Medina, ha iniciado hoy una huelga de hambre delante de la sede de Presidencia del Gobierno de Canarias en la capital grancanaria para denunciar “el incumplimiento” que las administraciones e instituciones privadas han llevado a cabo de “los acuerdos verbalmente adoptados”. Pérez Medina perdió sus reses en 2005, después de que el Gobierno le obligase a sacrificarlas por un supuesto brote de tuberculosis mal diagnosticado. En 2006, la administración se comprometió a reponer algunas cabezas de ganado y comercializar sus productos, según declaraciones a Radio San Borondón.
“Esta postura la mantendré hasta que se cumplan los acuerdos pactados o que se haga justicia”, señaló el ganadero de Arucas, que denuncia que como consecuencia de esos incumplimientos se ha decretado una orden de desahucio para el próximo 2 de septiembre que supondrá “para nosotros, una modesta familia rural con más de 40 años acreditados de trabajo en la actividad pecuaria, la pérdida absoluta de todo nuestro patrimonio: la casa familiar autoconstruida y la explotación ganadera”.
Pérez Medina está recibiendo el apoyo de un movimiento ciudadano y de los indignados del 15-M que ya se están moviendo para conseguir más apoyos de otros colectivos y personas “en la lucha por la defensa de la causa de esta familia ganadera de Canarias”.