MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
El Gobierno destinará el próximo año un total de 8.577,93 millones de euros a la política agraria, pesquera y de alimentación, lo que representa un descenso del 4,3% respecto al ejercicio anterior, según recoge el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2011.
El objetivo de esta política se centra en afrontar los nuevos retos de la Política Agrícola Común (PAC) y en realizar adaptaciones en determinados sectores para asegurar su supervivencia en algunas zonas del país.
En concreto, cerca del 72% de este presupuesto (6.156 millones de euros), se destinará a la regulación de los mercados agrarios. El proyecto destaca que las subvenciones a la producción agraria, que cuentan con aportaciones de los fondos europeos, pretenden evitar que los precios en origen desciendan por debajo de determinados límites y que los precios al consumo superen cotas “no deseables”, procurando que la oferta se adapte a la demanda.
Los programas dedicados al desarrollo rural sostenible tendrán una dotación de 1.721 millones de euros. Con estos créditos se busca impulsar las zonas rurales para prestar unos servicios públicos suficientes y de calidad y mejorar la situación socioeconómica de la población en estas áreas.
Además, para el desarrollo de actuaciones relacionadas con la calidad de las producciones agrícolas y ganaderas y las dirigidas a la mejora de la industrialización y comercialización agroalimentaria se destinan 229 millones de euros.
Por otro lado, al medio marino y la pesca corresponderán el próximo ejercicio 122 millones de euros, que se destinarán a la mejora de las estructuras y mercados pesqueros y a la protección de los recursos.
El proyecto de PGE para 2011 destaca en este apartado las dotaciones destinadas a la política de regadíos, por un importe de 67 millones de euros, y las dirigidas a la previsión de riesgos en las producciones agrarias y pesqueras, por 281 millones de euros.