Xabier Basáñez es, desde enero del pasado año, presidente de la Asociación de Ferias Españolas, una organización que aglutina a la mayoría de organizaciones feriales del Estado y a otras empresas relacionadas con el sector servicios.
El presidente de AFE hace un repaso del estado del sector ferial en España, tras haber participado durante tres jornadas en el XIII Congreso de la Unión de Ferias Iberoamericanas que, además, ha calificado como “el mejor de los celebrados en la última época”.
Tras años de complicada crisis, las ferias y congresos repuntan con nuevas propuestas, ¿qué podemos esperar de este sector?
Yo auguro un crecimiento continuado después de esta época de crisis, con el inicio de una época de bonanza económica en lo general que repercutirá en una mejora de todo el sector ferial español.
Los datos que ha presentado durante la celebración de este XIII Congreso UNIFIB, relativos a la auditoría de cuentas de 2016, reflejan que el sector está repuntando. ¿Qué ha variado en este último año para encontrarnos con cifras tan positivas?
Pues yo creo que hay dos circunstancias que hacen que esas cifras sean buenas. Por un lado, el hecho de haber padecido una crisis económica nos ha situado a todos, haciendo los deberes en cuanto a ajustar a nuestras respectivas organizaciones, poniéndonos las pilas y adecuarnos a una nueva situación que antes no existía. Es decir, antes vivíamos en un momento en el que lo único que importaba era crecer, crecer y crecer, lo que te hace situarte en otros parámetros. Pero, por otro lado, este sector es reflejo de lo que sucede en la economía general. Las ferias no son más que el espejo de lo que sucede en cada una de las industrias.
¿Qué tal se está desarrollando 2017 en los recintos feriales españoles? ¿Está siendo el año que esperaban?
A nivel estatal no tendremos datos hasta final de año cuando hagamos la nueva auditoría. Sin embargo, de las reuniones que vamos teniendo habitualmente, extraemos ya que hay un feeling de mejora. Ahora mismo el crecimiento es más moderado que en el pasado, pero es el suficiente para augurar un buen 2017 en el ámbito ferial.
¿Qué papel juegan las ferias en la repercusión económica?
Un papel muy importante que no se valora y que, además, tenemos que hacer un esfuerzo para valorarlo conjuntamente como sector. Estos días en el congreso, alguno de los ponentes hablaba de la necesidad de que se nos trate como una industria. Hoy en día no nos reconocen como tal. Nadie se refiere a la industria ferial, a pesar de que tiene bastante más valor que lo que genera pues, por un lado está lo que generamos nosotros, que son volúmenes importantes de facturación, de ingresos y de empleos directos; luego está el efecto indirecto, lo que generan los otros, como los hoteles, comercios, transporte, etc. Todo esto nosotros lo valoramos en torno a unos 3.500 millones de euros, pero es que además, hay un impacto que es imposible de medir y que es el relativo al negocio que se genera en las ferias.
¿Cuáles son los puntos fuertes de España como destino de ferias?
Pues yo destacaría en primer lugar que tenemos unos muy buenos recintos con unas magníficas ciudades. Además, contamos con excelentes profesionales porque llevamos muchos años haciendo ferias y eso tenemos que ponerlo en valor. Y, por último, aunque sea un tema coyuntural, que estamos en un crecimiento continuado que en los próximos años se espera que sea superior al resto de países de Europa.
Tras estos días de intercambio de experiencias, ¿en qué situación se encuentra España en relación con otros países de Iberoamérica?
Hay muchas diferencias entre Iberoamérica y España pero yo creo que Iberoamérica está deseosa que nuestro país invierta, ayude o colabore con ferias en su país, cosa que hasta ahora no se ha hecho. Sin duda hay una gran oportunidad de futuro y de estrechar lazos.
Por último, ¿qué tendencia aprecia de cara al futuro de las ferias y eventos en España?
Va a haber una evolución muy importante en los certámenes, en el sentido en el que cada vez va a cobrar más importancia la especialización. Además, la economía va a permitir que hay un mayor crecimiento, incluyendo nuevos nichos de mercado de ferias profesionales con temas que hasta ahora eran desconocidos. Y en el ámbito de las ferias de visitantes, una mayor especialización en torno a nuevos hábitos de consumo.