Moody's pone en revisión la deuda española

La agencia de calificación crediticia Moody's ha colocado la nota de solvencia de España, situada actualmente en 'Aa1', en revisión para una posible rebaja por la “vulnerabilidad” del país a las tensiones derivadas de sus necesidades de refinanciación en 2011, amplificada por la “fragilidad” de la confianza del mercado.

Al mismo tiempo, Moody's ha puesto bajo vigilancia negativa, para su posible degradación la nota (Aa1) del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), dado que su deuda está “total e incondicionalmente” garantizada por el Gobierno español.

La calificadora de riesgos ha tenido en cuenta para tomar esta decisión el potencial aumento del ratio de la deuda pública ante el riesgo de que la recapitalización de la banca implique un coste mayor de lo previsto, así como la creciente preocupación sobre la capacidad del Gobierno para lograr las necesarias mejoras estructurales en las finanzas públicas ante el “limitado control” del Ejecutivo central sobre las cuentas de las administraciones regionales.

En concreto, Moody's destaca que el Gobierno necesitará captar en 2011 unos 170.000 millones de euros, incluso después de contabilizar los ingresos potenciales por las recientes privatizaciones anunciadas, a los que se sumarían otros 30.000 millones por las necesidades de refinanciación de los gobiernos regionales.

“Además, los bancos españoles, cuya capacidad de financiación depende en parte de la fortuna de la nota soberana de España, tienen que refinanciar en 2011 alrededor de 90.000 millones en deuda”, añade.

Asimismo, la calificadora de riesgos apunta que estas necesidades de financiación se han vuelto más complejas por la fragilidad de la confianza de los mercados internacionales, que en años anteriores proporcionaban cerca del 50% de las necesidades de financiación del país, pero que ante la actual incertidumbre pueden mostrar menor interés.

Por otro lado, Moody's ha valorado también los costes potenciales para el Gobierno del proceso de recapitalización de las cajas de ahorros, que, bajo el escenario base, necesitarían unos 25.000 millones de euros para conservar un ratio Tier 1 del 8%, de los que ya habrían recibido 10.500 millones del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).

“Sin embargo, bajo un escenario de mayor tensión, las necesidades de recapitalización podrían aumentar hasta al menos 80.000 millones”, apunta la agencia de 'rating', que advierte de que, si se aplican requisitos de capitalización más estrictos, en el entorno del 12%, estas necesidades de capital llegarían a 90.000 millones, incluso con valoraciones conservadoras respecto a pérdidas potenciales.

Por otro lado, la decisión de Moody's refleja las preocupaciones de la agencia respecto a la capacidad del Gobierno de llevar a cabo las necesarias mejoras estructurales en las finanzas públicas en los 3 ó 4 próximos años.

En particular, estas preocupaciones se refieren al compromiso de los gobiernos regionales para controlar su gasto, así como a la capacidad del Gobierno central para aplicar la disciplina fiscal a nivel regional.

A este respecto, Moody's señala que “los recientes, aunque tímidos, pasos para mejorar la transparencia no serán suficientes para afrontar el problema fundamental de la escasa disciplina fiscal”.

Rescate

Sin embargo, la calificadora de riesgos subrayó que continúa considerando la situación crediticia de España “mucho más fuerte” que la de otros países de la eurozona bajo presión, lo que se refleja en la superior nota de solvencia de España.

“Moody's continúa viendo a España con un crédito mucho más fuerte que el de otros países bajo presión de la eurozona, lo que se refleja en una nota soberana significativamente más fuerte para España”, apuntó la agencia, que explicó que “de este modo, la revisión del 'rating' probablemente dejará la nota de España dentro de la categoría Aa”.

Asimismo, la agencia no considera que la solvencia de España se encuentre amenazada y en su escenario base “no espera que España deba recurrir al Fondo Europeo de Estabilidad Financiera”.

No obstante, las sustanciales necesidades de financiación del país, así como de los gobniernos regionales y la banca hacen al país susceptible de nuevos episodios de “estrés”, añadió la analista de Moody's Kathrin Muehlbronner.