SEÚL, 12 (EUROPA PRESS)
El secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Ángel Gurría, ha instado a los líderes del G-20 a que aceleren el ritmo de las reformas estructurales, ya que, en su opinión, es la mejor manera de “reforzar la recuperación y fortalecer el crecimiento económico a largo plazo”.
En una presentación realizada ante los jefes de Estado del G-20, Gurría recalcó que, después de haber agotado la mayoría del espacio para políticas macroeconómicas expansivas, lo necesario ahora es “una agenda clara y ambiciosa de reformas estructurales”.
A este respecto, destaca que las medidas presentadas por los países en el grupo de trabajo para un crecimiento sostenido y equilibrado sugieren que están de acuerdo con esta postura y recalca que la OCDE ha estado apoyando los esfuerzos de los gobiernos para desarrollar la agenda de reformas estructurales del G-20.
El secretario general de la OCDE destacó que los gobiernos que pongan en marcha un programa de reformas estructurales bien diseñado y bien aplicado pueden obtener un triple beneficio, ya que impulsaría la producción y el empleo, fortalecería las finanzas públicas y ayudaría a reequilibrar la demanda global.
Como ejemplo de su eficacia, Gurría recalcó que reducir los impuestos laborales al nivel más bajo de los países G-20 provocaría un incremento de la tasa media de empleo de 3,5 puntos porcentuales. Además, una reducción del desempleo de un punto porcentual mejoraría la posición fiscal del G-20 elevando en un 0,5% el PIB.
Por otro lado, apunta que, como ya mencionaron varios líderes en la cena que mantuvieron los miembros del G-20, el desafío actual es probar que el grupo es “tan bueno a la hora de construir un nuevo camino hacia el crecimiento sostenible como lo fue a la hora de gestionar la crisis financiera”. “Nuestra credibilidad y nuestra razón de ser está en juego”, añadió,