La Finca de Osorio acoge este sábado, 4 de agosto, la ya tradicional Cata Insular de Papas de Gran Canaria, una prueba de calidad y entrada restringida al público en la que participarán variedades de papas plantadas en la finca desde marzo de este año y en la que se determina cuál es la mejor papa de Gran Canaria.
Las nueve primeras corresponden a las que mayor producción han dado en el ensayo, así como una décima elegida por los técnicos directores del ensayo por sus características agronómicas, culinarias o beneficiosas para la salud.
El Cabildo trata así de valorar, un año más, las cualidades gastronómicas de este tubérculo, que cuenta con más de 1.200 hectáreas de plantaciones repartidas por todo el territorio insular y que producen más de 18 millones de kilos de papas para consumo local.
En Gran Canaria se produce más del 50% del total de papas consumidas en la isla, porcentaje algo superior al 40% recomendado por la FAO para la soberanía alimentaria de los pueblos.
El consejero del Sector Primario y Soberanía Alimentaria, Miguel Hidalgo, valoró los resultados agronómicos, ya que de las 31 variedades ensayadas, 27 superan los 37.000 kilogramos de producción por hectárea, algunas con rendimientos que alcanzan desde los 50.000 a los 120.000 kilogramos por hectárea.
Entre las variedades cultivadas se encuentran papas con el color de la piel blanca, roja o rosada, blanca con ojos rosados o violetas. Asimismo, el color interno puede ser blanco, crema, amarillo o incluso violeta.
Esta actividad, de gran trascendencia para el sector papero de la isla, continuará con la celebración de la II Feria Insular de Papas de Gran Canaria, que tendrá lugar entre el 31 de agosto y el 2 de septiembre en el Palacio Episcopal de Teror, en el marco de los actos de las fiestas en honor a la virgen del Pino.