Alianzas con partidos locales, una estrategia decisiva para el 24M
Los partidos de carácter local jugarán un papel importante de cara a los próximos comicios de mayo. El sistema electoral canario propicia a que se generen alianzas entre estas formaciones con otras mayoritarias para poder avanzar y obtener representación en todas las instituciones. Esta es, por ejemplo, la estrategia que lleva a cabo Nueva Canarias para expandirse a nivel insular.
Los nacionalistas se han ligado a distintas organizaciones en Gran Canaria: Roque Aguayro, en Agüimes; Asamblea de Barrios, en Valsequillo; Agrupación Sureste, en Ingenio; Bloque Nacionalista Rural, en Gáldar; Alpa, en Agaete; ACIN, en Moya, Alternativa por San Mateo; Compromiso por Firgas o la recién formada Juntos por Guía.
Aunque NC es la formación que más alianzas de este tipo ha cerrado en Gran Canaria, Coalición Canaria también concurrirá de esta forma en dos municipios. Es el caso de Ingenio, con el proyecto Somos, liderado por el alcalde Juan José Gil, que dejó el PP para fundarlo. Y además, se ha vinculado a La Fortaleza de Santa Lucía, en el municipio de Santa Lucía de Tirajana.
Otro pacto llamativo es el que ha cerrado el PP en el municipio de San Bartolomé de Tirajana. Los populares se han aliado a la Agrupación de Vecinos de San Bartolomé, después de que la Junta Directiva Nacional reuniera a sus más de 500 miembros para aprobarla, ya que así lo requieren los estatutos del PP.
El sociólogo Miguel Guerra explica que estas alianzas se crean con un interés mutuo. Por un lado, a los partidos locales les interesa tener un vínculo con organizaciones que formarán parte del Cabildo o del Parlamento de Canarias porque de este modo, podrán llevar a cabo mejores propuestas en sus municipios. “Es mucho más complicado lograr financiación para actividades, infraestructuras… si no estás asociado a otro partido que esté por encima”, puntualiza.
Guerra explica que se hace necesario que los partidos locales dispongan de un “paraguas político amplio” que le ayude a desarrollar determinadas iniciativas en el ámbito insular y autonómico, pero que incluso le servirá para tener presencia en Madrid. De este modo, lo que comienza siendo una propuesta para los vecinos de una localidad termina beneficiándose de los acuerdos adoptados por la formación con la que lleva a cabo la alianza. “Es igual que en el ámbito del Estado, los partidos grandes creen que es necesario estar en Europa y para ello también llevan a cabo alianzas”, asegura.
Sin embargo, estos vínculos no solo suponen beneficios para las formaciones de carácter municipal, los grandes partidos también obtienen ventajas de dichos acuerdos. “La gente a menudo define su comportamiento electoral con el voto al municipio” indica Guerra. Y es que un candidato bien valorado en una determinada localidad puede ser la clave para arrastrar ese voto en las instituciones superiores hacia los partidos con los que concurre en alianza. Por ello, el sociólogo explica que las organizaciones mayoritarias necesitan tener muchas “raíces locales”, pues “le va a permitir obtener una parte de ese voto en otras administraciones”.
Es el ejemplo de Antonio Morales, actual alcalde de Agüimes, un político bien valorado en la comarca y que ahora es el candidato de Nueva Canarias al Cabildo insular. Para Guerra los partidos conocen que es muy importante contar con una cara conocida y con cierto prestigio político y por ello otras formaciones como Podemos estuvieron interesadas en él.
El alcalde de Guía, Pedro Rodríguez, que abandonó recientemente Coalición Canaria para formar Juntos por Guía, es otro ejemplo que evidencia la estrategia de alianzas. Y es que esta nueva formación concurrirá con Nueva Canarias en las próximas elecciones. Este pacto es interesante para ambos, Rodríguez es una cara conocida en el municipio y servirá para que NC obtenga votos en Guía y para él es beneficioso en tanto que será el número cuatro en la lista al Parlamento de Canarias.
Esta incorporación de candidatos que proceden de organizaciones locales en las listas al Parlamento o a los Cabildos ha generado en este caso la conformación de Nueva Canarias Frente Amplio .
“El error de quedar aislado”
El sociólogo explica que debido a las barreras electorales de Canarias se hacen aún más necesarias estas coaliciones de partidos. “Como no vayamos aliados unos a otros es imposible superar dichas barreras”, recalca. Esta es una lección que ha sabido plasmar la nueva formación impulsada por el presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, tanto en su alianza en la isla con Unidos por Gran Canaria, como en el Parlamento con Unidos por Canarias. Para Guerra, estos pactos muchas veces “anti natura” suponen la única forma de combatir las reglas.
Además, considera que es una fórmula que contribuye a que las instituciones sean más plurales y representativas. Por este motivo, tacha de “error” que Izquierda Unida no haya concurrido en confluencia con Podemos en Las Palmas de Gran Canaria, sino que tan sólo una parte de sus militantes lo hayan respaldado. “Ahora han quedado aislados, por su interés de continuar con su purismo”, explica.
El sociólogo expone que antes de las elecciones europeas IU junto a UPyD encarnaban la esperanza de voto ante el desencanto con los grandes partidos que han representado el bipartidismo en España (PP y PSOE). Sin embargo, la irrupción de Podemos y Ciudadanos en el panorama político les “ha dejado fuera” y en el caso de Canarias “deja a estos partidos sin opciones”.
Para Guerra las confluencias entre partidos son positivas para tener peso en las administraciones, sin embargo, recuerda que también es necesario plasmar sus propuestas en el programa electoral y que haya entendimiento para poder gobernar. Recuerda que en otros países, como Alemania se gobierna con una alianza entre formaciones de ideologías diferentes pero en las que finalmente es posible llevar a cabo acuerdos, “es un problema de madurez democrática, unirse es necesario para dar respuesta a los problemas que existen”, concluye.