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Repsol ralentiza el ritmo en la última fase del sondeo

Canarias Ahora

Las Palmas de Gran Canaria —

Los trabajos del Rowan Renaissence, buque fletado por la multinacional Repsol para la búsqueda de petróleo en aguas de Canarias, encaran sus últimos días de trabajo antes de conocer los resultados de los análisis que dilucidarán si es rentable extraer el crudo del pozo Sandía.

Tanto los Cabildos de Lanzarote y Fuerteventura como el Gobierno de Canarias se han dirigido en las últimas semanas en distintas ocasiones al Gobierno de España para reclamar explicaciones e información detallada sobre la situación real de las operaciones de perforación que la petrolera acomete en la apertura del pozo Sandía, a 55 kilómetros de las costas de las citadas islas, tras detectar que Repsol sitúa sus trabajos en los últimos 18 días en torno a la cota de los -3.000 metros (la compañía tiene permiso de perforación hasta una profundidad de 3.170 metros).

Según expresan fuentes de la compañía, el motivo de que la perforación vaya más lenta ahora es porque a medida que se desciende y hay más profundidad, “más complicados” son los trabajos, aparte de que en estos momentos se intensifican las tomas de crudo porque es la zona clave de las muestras. No obstante, recuerdan que cuando al principio de la perforación avanzaban 110 metros al día “y la gente se sorprendía” de esto, también explicaron que con mayor profundidad la velocidad iría decreciendo.

Por otro lado, los dos cabildos insulares y el Gobierno autonómico han trasladado al ejecutivo de Rajoy su preocupación “por la total ausencia de información oficial sobre la evolución de este pozo”, y de forma especial por el hecho de que Repsol “ha publicado datos totalmente incorrectos sobre las maniobras de perforación y sobre las profundidades que, conociendo los miles de derrames de esta petrolera en otros lugares del mundo, inducen a la confusión y a la alarma”.

Desde la Institución conejera advierten que “analizando día a día los datos reflejados por Repsol en su propia web” las administraciones canarias constatan “una vez más” que la información de la petrolera responde “a las mismas connotaciones publicitarias y carentes de responsabilidad, credibilidad y rigor que manifiesta en este asunto desde que comenzara su propósito minero en las Islas hace 14 años”.

De este modo, declaran que en los datos en la web se observa que Repsol ha emitido un total de 11 partes informativos desde el día 14 de noviembre hasta este 8 de enero, si bien el último comunicado, fechado el 29 de diciembre, fue en realidad colgado el 2 de enero de 2015. En relación a las profundidades, el parte del 19 de diciembre señalaba que la perforación había alcanzado los 2.756 metros, mientras que el 29 de diciembre especifica que la profundidad alcanzada es de 2.740 metros, o sea, 16 metros menos que los supuestamente alcanzados diez días antes.

La empresa, por su parte, explica que en estos informes lo que dan son “profundidades medias” y que estas cifras normalmente se redondean. Así, aunque den una cifra de perforación “el encofrado puede ser unos metros más arriba”. Además, reiteran que la compañía informa “a diario a los medios de comunicación y órganos competentes (Ministerio de Industria y de Medio Ambiente)” y que siguen con su compromiso de explicar a la ciudadanía a través de la web. “No siempre hay novedades de interés a la sociedad ni aportamos detalles técnicos”, aseguran, pero defienden que tienen una “voluntad de transparencia absoluta” y reafirman que se está cumpliendo el calendario previsto.

Las administraciones reclaman más información

Por otra parte, las administraciones canarias han remitido en los dos últimos días nuevas solicitudes reclamando datos precisos sobre esta cata al Ministerio de Energía, Industria y Turismo y a la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea. En sendos documentos se refleja “la situación de vulnerabilidad” de la sociedad canaria frente a las operaciones mineras “no solo por la imposición de las mismas, sino por la ausencia absoluta de información veraz desde que comenzaron el 14 de noviembre de 2014”, sostienen desde el Cabildo de Lanzarote.

Entre las informaciones reclamadas se citan todos los informes relativos a cetáceos elaborados por los observadores especializados desde el primer día de trabajo y hasta la fecha de hoy, indicando los detalles de todos los avistamientos, las valoraciones de los científicos, la confirmación de que estos hayan estado presentes de forma ininterrumpida junto al Rowan Renaissance desde el primer día, el número de científicos contratados, y las entidades científicas a las que pertenecen.

Los Cabildos canarios y el Gobierno Autónomo denuncian que “ni siquiera para la labor de seguimiento ambiental” se hayan contratado a observadores científicos canarios y enfatizan que Repsol anunció en 2012 que las prospecciones podrían generar 52.000 empleos en las Islas, “cifra que pasó a 5.000 posteriormente, más tarde a 3.500, y ahora que concluye la primera prospección, la petrolera afirma que ha generado 40 puestos de trabajo vinculados a la actividad portuaria”.

Los Cabildos y el Ejecutivo canario han reclamado además toda la información pública disponible sobre tipos de medición y resultados en torno a los ripios y lodos tóxicos que la perforación haya depositado sobre el lecho marino, así como sobre la extensión radial que estos han podido alcanzar a partir de la cabeza del pozo. La información solicitada abarca datos sobre niveles de presión sonora de las operaciones y sobre resultados de las analíticas efectuadas en el periodo pre-operacional sobre la columna de agua y sobre el sedimento de lodos, incluyendo, como establece la Declaración de Impacto Ambiental publicada en el BOE del 10 de junio, los efectos sobre organismos bentónicos.