ISLAMABAD, 15 (Reuters/EP)
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, instó a los donantes internacionales a acelerar la ayuda a Pakistán después de las peores inundaciones en el país en décadas que se han cobrado las vidas de más de 1.600 personas, destrozado la economía del país y afectando, de un modo u otro, a más de 20 millones de paquistaníes.
“Estoy aquí (...) para compartir mi compasión y la solidaridad de Naciones Unidas con el pueblo y el Gobierno de Pakistán en este momento de prueba”, dijo Ban al llegar al país asiático. “Y para pedir al mundo que acelere su ayuda al pueblo paquistaní”, declaró nada más llegar al aeropuerto de Chaklala, donde fue recibido por el ministro de Exteriores, Shah Mehmood Qureshi y el ministro de Interior Federal, Rehman A Malik. El secretario general planea visitar las zonas inundadas el domingo.
Las inundaciones que se han producido este verano en gran parte de Pakistán han generado unas pérdidas de unos 250.000 millones de rupias (más de 2.267 millones de euros) en el sector agropecuario, y para la recuperación del país harán falta miles de millones de euros, según han afirmado expertos paquistaníes citados por el periódico 'Dawn'.
Ban se reunió con el primer ministro Yusuf Raza Gilani y el presidente Asif Ali Zardari, quien ha sido el blanco de críticas y del malestar popular por viajar a Europa mientras se desarrollaba la catástrofe y no suspender la gira.
Ayer sábado, el enviado de Pakistán ante Naciones Unidas, Zamir Akram, lamentó que la inmensidad de la devastación ha tardado demasiado en ser reconocida por la comunidad internacional, e indicó que hasta el momento no se había recibido la ayuda suficiente.
Las aguas de las inundaciones representan una nueva amenaza para la poblada provincia de Sindh y la provincia de Baluchistán, en el suroeste del país, una región que también ha sido golpeada por décadas de insurgencia separatista.
Al menos 500.000 toneladas de trigo han sido destruidas por las inundaciones. En Kot Addu, en el sur de Punjab, miles de sacos yacen arruinados debido a que los trabajadores no pudieron sacarlas del agua lo suficientemente rápido para rescatarlas de la crecida
“¿Cuántas bolsas de trigo puedes cambiar a un lugar seguro en cinco o seis horas?”, dijo Naseem Khan Khattak, propietario de un molino de harina que fue sumergido por las inundaciones. “No pudimos hacer absolutamente nada. ¿Cómo se combate un diluvio?”, agregó.