El nuevo primer ministro británico, David Cameron, confirmó que el Gobierno que presidirá tras recibir la confirmación por parte de la Reina será una coalición “plena e integral” con los liberaldemócratas puesto que, tras el escenario sin mayorías absolutas que dejaron los comicios del 6 de mayo, esta apuesta supone la “manera correcta de asegurar el Gobierno estable que este país necesita”.
En su primera intervención en la que será su nueva residencia, en Downing Street, Cameron destacó la capacidad de los nuevos socios de “poner aparte las diferencias políticas” que afloraron en estas cuatro jornadas de negociaciones y garantizar un entendimiento que tiene como objetivo la formación de un Gabinete “fuerte y decisivo” para hacer frente a los retos pendientes en Reino Unido.
Al respecto, el nuevo primer ministro, el más joven en dos siglos, reconoció que, debido al estado de la economía, habrá decisiones “difíciles”, pero prometió “cambio real” para garantizar “justicia y equidad”. “Donde la gente no se pregunte sólo cuáles son sus derechos, sino cuáles son sus responsabilidades”, declaró, ante la nube de fotógrafos que lo esperaban ante la residencia oficial a su regreso del Palacio de Buckingham.