MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) lanzó este lunes un llamamiento preliminar de emergencia de diez millones de francos suizos (algo más de siete millones de euros) para poder asistir a 100.000 personas afectadas por la violencia desatada en el sur de Kirguistán.
El llamamiento se produce mientras prosiguen los enfrentamientos étnicos que comenzaron el pasado 10 de junio en la ciudad kirguís de Osh pero que se han extendido a otras ciudades provocando que al menos 80.000 personas hayan abandonado sus hogares. Más de 100 personas han muerto y otras 1.200 han resultado heridas según las autoridades kirguisas.
El CICR espera tener disponibles reservas alimentarias para cerca de 100.000 personas el próximo mes. Un avión cargado con suministros médicos y otro material fue enviado ayer a Osh, y en los próximos días llegarán doce vuelos más con diferente equipamiento.
Esta organización señaló que también está de camino personal adicional del CICR, que trabaja con la Sociedad de la Media Luna Roja de Kirguistán para distribuir los suministros médicos que se necesitan con más urgencia a los hospitales locales.
“La situación en Jalalabad ha empeorado de manera considerable durante las últimas 24 horas. Es muy peligrosa”, afirmó el portavoz del CICR Pierre Emanuel Ducruet, que pudo llegar a las afueras de la ciudad esta mañana.
“Hemos atravesado varios puestos de control y hombres armados con rifles. Debido a las restricciones de seguridad, no pudimos ir más allá. En Osh, la situación está un poco más calmada hoy que en los últimos días, pero hay numerosas casas y coches quemados. Algunas zonas están desiertas, y creemos que muchas personas permanecen dentro de sus hogares porque están demasiado asustadas”, añadió.
En la parte uzbeca de la frontera con Kirguistán, las autoridades dicen que han registrado a 32.000 familias como refugiados, la mayoría mujeres y niños. El CICR ha sido invitado por el Gobierno uzbeco a tomar parte en una visita conjunta con otras organizaciones a cinco campamentos provisionales para refugiados.
“Parece que hay numerosos heridos entre los refugiados. Vi al menos 40 hombres con heridas de bala, y dos madres me han señalado que han perdido a sus hijos en el caos”, lamentó el subdirector de la delegación regional del CICR en Tashkent, François Blancy. “La gente está en estado de 'shock', hay informaciones de casas incendiadas con los niños dentro, y el CICR está claramente preocupado por las informaciones de violencia extremadamente brutal”, añadió Blancy.