WASHINGTON, 19 (Reuters/EP)
El presidente estadounidense, Barack Obama, y su homólogo chino, Hu Jintao, han prometido encontrar un terreno común para la cooperación y han anunciado acuerdos de exportación valorados en 45.000 millones de dólares con motivo de la visita del mandatario asiático a la Casa Blanca.
Obama, que ha recibido a Hu con todos los honores y la pompa de una visita de estado, ha defendido que ésta constituye una oportunidad para demostrar que “hay mucho en juego en el éxito del otro”. “Incluso aunque nuestros países compiten en algunas áreas, podemos cooperar en otras”, ha subrayado el presidente estadounidense, llamando a “aprovechar estas posibilidades juntos”.
“En un mundo interconectado, en una economía global, los países --incluidos los nuestros-- serán más prósperos y más seguros si trabajamos juntos”, ha incidido el mandatario estadounidense, asegurando que “Estados Unidos da la bienvenida a la emergencia de China como un miembro fuerte, próspero y exitoso de la comunidad internacional”.
Para demostrar los beneficios de las relaciones económicas, ambos países han llegado a un acuerdo de exportación, valorado en 45.000 millones de dólares que incluye, entre otras cosas, la adquisición por China de 200 aviones Boeing, según ha indicado un responsable estadounidense poco antes del encuentro.
Por otra parte, Obama ha hecho mención, aunque de forma caballerosa, a la cuestión de los Derechos Humanos en China. “La historia demuestra que las sociedades son más armoniosas, las naciones son más exitosas y el mundo es más justo cuando los derechos y las responsabilidades de todos los países y todas las personas se mantienen, incluidos los derechos universales de cualquier ser humano”, ha aseverado.
“NUEVO CAPÍTULO”
Por su parte, Hu ha indicado que su visita a Estados Unidos busca “reforzar la confianza mutua” y abrir un “nuevo capítulo” en las relaciones si bien ha mostrado su rechazo a cualquier intento de presionar a China en lo relativo a su moneda, los Derechos Humanos y otras disputas que considera como asuntos internos.
“China y Estados Unidos deben respetar las opciones del otro para desarrollarse y (...) los intereses centrales del otro”, ha defendido Hu, que fue recibido en la Casa Blanca con una salva de 21 disparos, guardia de honor y los himnos de los dos países en una ceremonia cuidadosamente preparada.
“Deberíamos adoptar una perspectiva a largo plazo, buscar terreno común al tiempo que resolvemos las diferencias, y trabajar juntos para alcanzar un desarrollo sostenido, sólido y continuado a nuestras relaciones”, ha propugnado el mandatario chino.
No obstante, ha advertido de que “nuestra cooperación como socios debería basarse en el respeto mutuo”, para lo que propuso “profundizar el entendimiento mutuo mediante la comunicación y aumentar la confianza mediante el diálogo”, pero también “en el beneficio mutuo”.
En un mundo cada vez más interdependiente, según Hu, ambos países deberían aprovechar la oportunidad de seguir adelante “de la mano y trabajar juntos para reforzar la cooperación como socios” junto con otros países para “construir un mundo armonioso de paz duradera y prosperidad común”.
El mandatario chino llegó anoche a Washington, donde cenó con Obama en la Casa Blanca. Al término de su encuentro de hoy, ambos presidentes ofrecerán una rueda de prensa conjunta.