El Consejo de Gobierno de Canarias ha legalizado siete explotaciones ganaderas de la Isla que se encontraban en situación alegal. Tal adaptación a la normativa en vigor de los citados establos, aprobada el pasado 20 de diciembre, se ha realizado de acuerdo a la Ley de Medidas Urgentes en materia de Ordenación Territorial para la Dinamización Sectorial y Ordenación del Turismo que prevé el procedimiento para la regularización y registro de instalaciones agropecuarias del Archipiélago, informa la Consejería de Presidencia del Ejecutivo regional.
Además de las siete explotaciones de ganado localizadas en La Palma, han sido legalizadas también cinco en Gran Canaria, cinco en Lanzarote, tres en Tenerife y dos en Fuerteventura. Con este nuevo bloque, ya son 264 las regularizaciones efectuadas por el Gabinete canario hasta la fecha, de las de las 967 solicitudes formuladas hasta el momento.
La Ley 6/2009 de Medidas Urgentes, aprobada por el Parlamento de Canarias en abril de 2009, según explica el citado departamento autonómico en un comunicado, “permite la legalización urbanística de las explotaciones ganaderas de las Islas en situación alegal, que cumplan con los requisitos que establece la ley en materia de seguridad jurídica, sanitaria y ambiental, posibilitando así su acceso a las ayudas destinadas al fomento de dichas instalaciones”.
Las reseñadas instalaciones, en funcionamiento e inscritas en el Registro de Explotaciones Ganaderas, “han sido ejecutadas con anterioridad a la entrada en vigor de la Ley 9/1999, de 13 de mayo, de Ordenación del Territorio de Canarias, y se encuentran en algunos de los supuestos contemplados en el apartado 1 del artículo 5 de la Ley 6/2009, de 6 de mayo”.
De acuerdo a lo establecido en el apartado 6 del artículo 5 de la Ley 6/2009, de 6 de mayo, se ha dado audiencia a los cabildos y a los ayuntamientos en cuyo término municipal se encuentran ubicadas dichas explotaciones, y han sido sometidos al trámite de información pública los estudios previos a su legalización, con la publicación de las correspondientes Resoluciones de la Dirección General de Ganadería.
La fuente mencionada fuente expone que “numerosas instalaciones que hoy constituyen grandes explotaciones de ganado han surgido de forma más o menos espontánea, muchas veces como procesos de reconversión funcional a partir de actividades tradicionales, que en la actualidad se encuentran en una indeseable situación de irregularidad”. Por otra parte, concluye, “el rápido proceso de crecimiento del sector ha entrado en conflicto, en ocasiones, con las necesarias políticas de ordenación y protección del suelo y del medio ambiente”.