Un ayuntamiento de La Palma denuncia a la Iglesia por apropiarse de dos de sus plazas públicas
El Ayuntamiento de San Andrés y Sauces, en la isla de La Palma, y el Obispado de Tenerife se verán en los juzgados porque la diócesis se ha apropiado de dos plazas públicas en los alrededores de la ermita de San Sebastián, en el casco de San Andrés, y de la iglesia de San Juan, en la zona de Los Galguitos, que son propiedad del Consistorio y que fueron sufragadas en su construcción incluso por algunos vecinos sauceros.
Para despojarle a San Andrés y Sauces de estas dos plazas la Iglesia empleó la conocida como ley Aznar, una reforma de la legislación hipotecaria en 1998 que permitió a esta institución inmatricular propiedades desde ese año hasta el pasado 2015 tan solo con una certificación del obispo. Con este método las diócesis de todo el país se hicieron en estos 17 años con unos 4.500 bienes, entre ellos catedrales y museos.
Tal como explica el alcalde, el socialista Francisco Paz, la historia se remonta al mes de marzo de 2015 cuando al Consistorio llegó una notificación del Registro de la Propiedad en la que se les señalaba que dos espacios públicos se habían inscrito a nombre de la Iglesia a pesar de que estaban en el inventario de bienes y derechos del Ayuntamiento.
“Comunicamos al Obispado que eran del Ayuntamiento y que había testigos que certificaban que esas plazas fueron construidas por los vecinos”, indica Paz. El silencio fue la respuesta dada por la Diócesis Nivariense, por lo que la administración local decidió poner el tema en manos de sus abogados, quienes optaron por presentar una demanda por la vía administrativa. Como comenta el alcalde, el juicio debió celebrarse a principios de este año, pero se ha aplazado sin fecha.
El alcalde apunta que en la explanada junto a la ermita de San Sebastián hay un parque infantil que se renovó hace años con fondos municipales, mientras que la plaza de la iglesia de San Juan se remodeló e incluso existe un quiosco que fue construido por la comisión de fiestas. A ello añade que el Ayuntamiento siempre se ha encargado del mantenimiento de los dos espacios.
Paz muestra su malestar con la Diócesis Nivariense porque no se ha sentado a negociar con la administración municipal, optando por un silencio que ha terminado en los juzgados. “Lamentamos la falta de negociación, lo mínimo es responder y sentarnos para ver qué es lo que pasa porque esa plaza la usan los vecinos y los visitantes. Es lamentable que tengamos que gastar fondos del pueblo para recuperar algo que es nuestro, además, hay otros inmuebles de su propiedad que no mantienen. Si [las plazas] pasan a ser de la Iglesia, las va a mantener la Iglesia. Se verán abandonadas por el Ayuntamiento porque habrá informes en contra para invertir”, avanza el alcalde.
Desde el Obispado responden a este periódico con un escueto mensaje a través de WhatsApp en el que indican que “la información sobre este tema es bastante pobre, entendemos que hemos cumplido con la ley registrando lo que es nuestro. El Ayuntamiento entiende que esas plazas le corresponden a su patrimonio y nos ha demandado, estamos a lo que dicte el juez cuando emita la sentencia”.