Las aguas de aumento de las lluvias dejan en el Valle 2.500 pipas a la hora

La borrasca que ha 'visitado' La Palma durante los últimos días, al venir sin viento, ha dejado “una lluvia mansa” que es “un regalo extraordinario” para el campo, ha señalado a LA PALMA AHORA el presidente de la Asociación Palmera de Agricultores y Ganaderos (Aspa), Miguel Martín. También ha efectuado “una recarga” del acuífero insular “al final del otoño, cuando, ante la escasez de aguaceros, creíamos que íbamos a entrar en un periodo de sequía”. Asimismo, según fuentes del Consejo Insular de Aguas, gracias a ella, “están entrado estos días” en la balsa de Dos Pinos, situada en el Valle de Aridane, unas 2.500 pipas (cerca de 1.250 metros cúbicos) a la hora de los caudales de aumento de las Haciendas de Argual y Tazacorte procedentes de las precipitaciones registradas en La Caldera de Taburiente. Es el único embalse de la Isla que está, en estos momentos, almacenando agua de los citados chubascos.

(*Se encuentra vacía para realizar labores de revisión y mantenimiento de la lámina impermeabilizante)Se encuentra vacía para realizar labores de revisión y mantenimiento de la lámina impermeabilizante.

Las 11 balsas del Consejo Insular de Aguas se encuentran actualmente al 32% de su capacidad. Exactamente, tienen embalsados 883.119 metros cúbicos (m3) de un total de 2.755.710 m3 toda vez que, La Laguna de Barlovento, operativa desde hace solo unas semanas tras repararse la última avería detectada, ha reducido su posibilidad de hacer acopio de forma significativa al pasar de unos tres millones de m3 a algo más de un millón. A día de hoy, tiene solo 73.920 metros cúbicos y, en consecuencia, está solo al 7% de su volumen de llenado. En este descomunal depósito hídrico, el más grande de la Isla, están entrando del orden de 400 pipas a la hora de agua de galerías ya que, en su entorno, apenas ha llovido y los barrancos no han corrido en esta ocasión.

Igualmente, en el municipio de San Andrés y Sauces, la balsa de Los Gaguitos, está recibiendo 250 pipas a la hora de los sobrantes de galerías, y la de Adeyahamen en torno a las 700, mientras que la de Bediesta, ubicada justo al lado, se halla vacía al estar sometida a labores de mantenimiento y reparación de una de sus láminas.

En Puntagorda, tanto la que lleva este mismo nombre como la de Montaña de Arco, reciben estos días 55 y 90 pipas a la hora de agua de galerías, respectivamente. Tal 'inyección', explicó la reseñada fuente del Consejo Insular, es variable y, al igual que en las demás, depende de la demanda de riego de los socios de las galerías.

El presidente de Aspa, Miguel Martín, insistió en que “estas lluvias han venido de forma magnífica” pues han llegado “al final del otoño cuando ya creíamos que entrábamos en otro periodo de sequía”.

Dijo que estas aguas “vienen muy bien para los cultivos de secano, como los viñedos, almendreros y plantas forrajeras y leguminosas para la cabaña ganadera”. Asimismo, concluyó, son un “obsequio” para los de regadío pues “limpian la tierra de plagas” y suponen también “un importante ahorro al sector al no tener que elevar agua de los pozos y, sobre todo, recuperar el acuífero”.