Ingenieros abogan por refrescar la zona y asegurar el terreno para garantizar la repoblación en La Palma

Europa Press

Madrid —

Ingenieros forestales e ingenieros de montes han coincidido en la necesidad de emprender una serie de medidas para preservar la zona incendiada de la isla de La Palma. Entre ellas, abogan por refrescar la zona, asegurar la fijación del terreno y realizar una repoblación estructurada. Igualmente, proponen que cuando se extinga definitivamente el fuego, se emprenda un análisis a largo plazo sobre las consecuencias del incendio.

Del mismo modo, han pedido una mayor inversión en prevención de los incendios con el objetivo de preservar el patrimonio forestal. Creen que es necesario aplicar “el sentido común” y una mayor educación ambiental para evitar negligencias como la que provocó el incendio en la isla.

Tras el incendio, para el decano territorial del Colegio de Ingenieros Forestales de Madrid, Carlos Madrigal, lo primero que hay que hacer es asegurar el terreno y evitar que, con las primeras lluvias de otoño, se produzcan desplazamientos de tierra. Para ello, el decano propone acotar ciertas zonas de nivel sobre el relieve con los restos originados por el incendio.

“Es importante realizar este paso, ya que se podrá eludir la erosión de las cotas más altas y la anegación de los valles”, ha declarado Madrigal a Europa Press.

Por otro lado, afirma que a la hora de repoblar el monte, hay que saber cuáles van a ser las utilidades que se le va a dar y aplicar la vegetación anterior. Cree que en función a esto, la repoblación debe plantearse de una forma o de otra. Igualmente, pide que guarden una estructura, es decir, que tengan una densidad adecuada para que se evite una propagación de futuros fuegos.

Asimismo, el decano autonómico en la Islas Canarias del Colegio de Ingenieros de Montes, Juan Carlos Santamarta, ha añadido, que el fuego no se apaga “de un día para otro”, sino que necesita de semanas refrescando la zona.

También ha incidido en la necesidad de asegurar la zona para evitar las aguas de escorrentía que transporten la ceniza a los ríos. En este sentido, también ha destacado la necesidad de las masas forestales a la hora de recargar los acuíferos. “Una de las consecuencias de los incendios es la impermeabilización de los suelos y esto implica que una isla seca como La Palma, pierda recursos hídricos”, ha comentado.

Finalmente, Santamarta ha pedido “un examen de conciencia” y que se inviertan más recursos en la prevención de los incendios, así como ha recalcado ya no solo el valor paisajístico de los bosques, sino también en fijación del suelo o de potencial económico.