El Cabildo presentó el borrador del Plan de Recuperación de La Palma, “un documento que traza la hoja de ruta para emprender, de manera coordinada y eficiente, la reactivación económica y social de la Isla”, indica en una nota de prensa.
En una reunión celebrada este lunes, 31 de enero, en el Museo Arqueológico Benahorita, el presidente del Cabildo, Mariano Zapata, explicó que La Palma “vive un proceso de cambio en el que todos los sectores, desde la administración pública, hasta el sector empresarial, hasta la ciudadanía, deben ser sujetos activos del cambio”.
“Hemos abierto una etapa en la que se debe proyectar una nueva idea de Isla que no mire al futuro sino que lo alcance y lo materialice. Queremos ofrecer oportunidades para todos y planificar, de manera valiente y responsable, un nuevo modelo para La Palma”, aseguró el presidente.
En este sentido, añadió que la finalidad del Plan “es conjugar nuestra esencia y tradición con una realidad moderna, que nos ayude a abrazar los objetivos del año 2030 y nos ubique en una posición ventajosa y atractiva para atraer y fijar a la población”.
En la reunión, además del presidente del Cabildo y otros miembros de la Institución, acudieron representantes de las asociaciones de vecinos de El Remo, La Bombilla, Las Manchas, de Timaba (Todoque), La Laguna-Tajuya, así como la Asociación Social Volcán Cumbre Vieja y la Asociación Plataforma Afectados por la Erupción del Volcán Cumbre Vieja 2021.
Los tres pilares del Plan de Recuperación
Cabe apuntar, se señala en la nota, que el Plan de Recuperación de La Palma pivota sobre tres pilares: la atención de las personas damnificadas, la puesta en marcha de nuevas infraestructuras y la reactivación de la actividad económica y social.
Respecto a la atención de las personas, se plantean medidas para ayudar a los damnificados a recuperar su vida cuanto antes, y que, a su vez, puedan desarrollarse de manera autónoma en los distintos ámbitos de la sociedad. En esta línea también se ponen sobre la mesa demandas como la continuidad del reparto de viviendas a las personas afectadas; ayudas para segundas viviendas, viviendas vacacionales, cuartos de apero y bodegas; así como la compra de suelo público en el Valle de Aridane paliar la posible especulación, al tiempo que se consiguen suelos para hogares y zonas industriales, entre otros.
En cuanto a las infraestructuras, para el Cabildo “es un tema vital” por lo que supone para “la economía y el arraigo”. Tras el volcán, agrega, se hace necesario un plan integral de reposición y reconstrucción de las redes viarias afectadas; así como una nueva red hidráulica que atienda las necesidades de un sector fundamental para la Isla como es el primario. Algunas de las iniciativas ligadas a estos asuntos están la creación de un fondo mínimo de 60 millones de euros para recuperar la conectividad vía terrestre, la retirada de lava en las carreteras y accesos bloqueados, la ejecución de la obra del embarcadero de La Bombilla y el corredor del Sur para conecta la vía El Remo-La Zamora; la recuperación de la carretera LP-2, así como la carretera de la costa.
Como tercer eje del Plan está la reactivación económica y social. Además de estimular la ganadería y la agricultura, en especial el cultivo del plátano, uno de los más afectados por la erupción, hay que desarrollar planes específicos para fomentar y recuperar el turismo en la Isla, además de promover políticas de fijación de la población en el Valle de Aridane y emplear recursos para fomentar el comercio de la zona. Tampoco hay que olvidar el impulso y finalización de actuaciones históricas, como el Balneario de Fuente Santa; o las tareas en materia de educación y formación para reorientar las vocaciones emprendedoras que den dinamismo a la Isla.