MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
El Pleno del Congreso de los Diputados aprobó este martes por cuatro votos de diferencia el límite de gasto no financiero para 2011, el primer paso para la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado para 2011, que sólo recibió el apoyo de los votos del PSOE, si bien pudo salvar el rechazo de PP, PNV, ERC, IU, ICV, BNG, NaBai y UPyD gracias a las trece abstenciones de CiU, Coalición Canaria y UPN. No obstante, toda la oposición coincidió en criticar duramente la política presupuestaria del Gobierno
Aunque la vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, defendió que el objetivo 'techo de gasto' para 2011 se enmarca en un proceso de “aceleración” de la reducción del déficit público ante el “notable deterioro” de las cuentas públicas, que tendrá un efecto positivo en la reducción de la prima de riesgo de España en los mercados financieros, e impulsará la captación de financiación del sector privado y la recuperación, sus argumentos no calaron en los grupos, salvo el PSOE.
Abrió 'fuego' el portavoz económico del PP, Cristóbal Montoro, que apuntó en tono irónico que la vicepresidenta había “regalado” al hemiciclo una “larguísima exposición” de más de cuarenta minutos para “celebrar que continúa en su puesto”, presentando escenario “bastante inútil” de y estimaciones “que no son fiables ni rigurosos”. “Seguimos en zona de riesgo y sin poder financiar la posición y eso es por culpa del Gobierno”, remachó.
En este sentido, defendió que las cifras del Gobierno “no son austeras” porque descontando las medias de estímulo de 2010, que no se repiten en 2011, sólo muestras una reducción del 0,2% en el déficit. “No estamos ante un auténtico planteamiento de austeridad, sino un cálculo cuasiexótico”, señaló Montoro, quien acusó al PSOE de no creer en la estabilidad presupuestaria al negarse a una reforma de las instituciones.
“España lo que necesita es un cambio de Gobierno”, quien lamentó que no haya sido posible lograr una mayoría “responsable” de la oposición contra un proyecto de Presupuestos que “agravará” el clima social de España.
CIU DA UN “MINICRÉDITO” AL GOBIERNO
El portavoz económico de CiU, Josep Sánchez Llibre, replicó a Montoro que su postura de abstención se debe, precisamente, a su responsabilidad e indicó que parece que el PP quiere ver a la economía española “intervenida por la Unión Europea o por el FMI” y defendió la necesidad de dar un “minicrédito” al Gobierno para ver si es capaz de presentar en septiembre unos Presupuestos que contribuyan a una “verdadera reducción” del déficit, aunque recalcó que de sus palabras no se deriva un futuro apoyo de CiU alas cuentas públicas.
“Nuestra posición es altamente critica y altamente responsable con el balance de la situación”, incidió Sánchez Llibre, quien destacó que la aprobación del techo de gasto enviará una señal positiva a los mercados en relación con la solvencia de los objetivos de reducción del déficit, algo que, advirtió, “no puede pasar por subidas de impuestos”.
PNV NO CONFÍA EN EL GOBIERNO
Por su parte, el portavoz del PNV, Pedro Azpiazu, confirmó el voto en contra de los seis diputados de su formación porque para “avanzar conjuntamente” es imprescindible un marco de confianza y “unas complicidad políticas” que, tras del Debate sobre el estado de la Nación --que se saldó son acuerdos entre el PSOE y los nacionalistas vascos-- “hoy no parece posible”.
Azpiazu calificó de “debate a ciegas” la votación del techo de gasto, ya que lo importante para ver cómo el Gobierno asume los compromisos impuestos por Bruselas para “mantenerse dentro del euro”. “La Unión Europea está tutelando el proceso y el debate, no es una cuestión menor”, recalcó.
Desde ERC, Joan Ridao, señaló que no piensa dar un cheque en blanco a la política económica “errática” del PSOE una techo de gasto que no ve fiable y arrastrará al país diecisiete años atrás en el tiempo en niveles de consolidación fiscales e inversiones con un sistema tributario “raquítico”. No obstante, admitió tenga garantizado gracias al “equipo médico habitual” --en alusión a CiU-- par salvarlo.
Su compañero de grupo parlamentario y diputado de IU, Gaspar Llamazares, rechazó el recorte “injustos e impuesto por Bruselas” que supone, a su juicio, el techo de gasto y comparó el debate entre el PSOE y el PP sobre el “debate sobre la reforma protestante” entre Calvino y Lutero, pero siempre identificando el mercado con Dios y el sector público con el Mal. “Nosotros no estamos en esa cuerda”, remarcó.
El diputado del BNG, Francisco Jorquera, lamentó que el Gobierno siga el “camino equivocado” para reducir el déficit. Su compañera en el Grupo Mixto, Nafarroa Bai, justificó su rechazo por el precedentes sentado por las medidas de ajuste aprobadas en mayo. “Ya sabemos cómo serán los Presupuestos”, resumió.
UPN: UN SÓLO VOTO NO ES SUFICIENTE
La portavoz de Coalición Canaria, Ana Oramas, acusó al Gobierno de ser “responsable” de presentar un Presupuestos y la discusión es “en qué usa el gasto”, por lo que instó al Gobierno a buscar en las cuentas públicas de 2011 alternativas a la congelación de las pensiones y capacidad para reducir el déficit.
Por su parte, el diputado de UPN, Carlos Salador, señaló que el debate constata la incapacidad del Gobierno y la oposición de ponerse de acuerdo. “España no merece que este Gobierno y esta oposición renuncie a alcanzar soluciones compartidas sin estridencias”, lamentó el diputado navarro, quien exigió un pacto entre PSOE y PP para el control, el equilibrio y la transparencia presupuestaria. “Nuestra formación actúa responsablemente, pero un solo voto no es suficiente”, admitió.