El Rey, Don Juan Carlos, afirmó este sábado a su llegada a Palma de Mallorca para pasar sus vacaciones de verano que a los terroristas de ETA “seguiremos dándoles en la cabeza y hay que combatirlos hasta acabar con ellos”, al tiempo que aseguró sentirse “segurísimo y encantado” de llegar a Mallorca.
Su Majestad hizo estas declaraciones minutos después de llegar junto a la reina Doña Sofía a la base militar Son Sant Joan, donde fue recibido por las principales autoridades de la isla, entre las que se encontraban el presidente del Govern, Francesc Antich, el delegado del Gobierno, Ramón Socías, la presidenta del Parlament, Maria Antònia Munar, la presidenta del Consel de Mallorca, Francina Armengol, la alcaldesa de Palma, Aina Calvo, el jefe de la Guardia Civil en las islas, Basilio Sánchez Rufo, y el máximo dirigente de la Policía Nacional en el archipiélago, Bartomeu Campaner.
Precisamente, los Reyes aprovecharon su llegada a Palma para hablar durante más de cinco minutos con las autoridades de las islas sobre el último atentado perpetrado por la banda terrorista ETA el pasado jueves en la localidad mallorquina de Palmanova, que costó la vida a dos agentes de la Guardia Civil.
Tras ser preguntado por si sentía seguro al pasar las vacaciones en Palma después de esta acción terrorista, el Rey Don Juan Carlos recalcó que se siente “segurísimo”. Respecto al atentado y tras ser preguntado por el mal comienzo de sus vacaciones, reconoció que “desgraciadamente es así, pero hay que seguir”.
Por otra parte, preguntado sobre cómo se presentan sus vacaciones en su residencia estival del Palacio de Marivent, respondió “ya veremos dentro de unos días”.
Don Juan Carlos y Doña Sofía han aterrizado en la base militar del Aeropuerto de Palma procedentes de su viaje oficial en las Islas Madeira a las 19.31 minutos, sólo un minuto más tarde de lo previsto. El Rey fue el primero en salir del avión vestido de traje y corbata y segundos más tarde lo hizo la Reina, quien vestía unos pantalones negros, una chaqueta blanca y una blusa estampada de flores de colores, si bien ambos bajaron juntos las escaleras hacia las instalaciones militares del aeródromo, donde les esperaba el jefe de la base aérea.
Posteriormente y ante una gran expectación mediática, saludaron en primer lugar a Antich y, seguidamente, a Munar, Socías, Calvo y Armengol, a quienes preguntaron cómo se encontraban tras el atentado de ETA. A continuación, saludaron a las autoridades policiales y militares y el Rey se dirigió a la prensa para saludarles, donde fue preguntado sobre el atentado mortal del pasado jueves.
Así, sus Majestades llegaron a la isla el segundo día de luto oficial por la muerte de los dos jóvenes guardias civiles, Diego Salvá Lezaun, natural de Pamplona y de 27 años, y Carlos Sáenz de Tejada, nacido en Burgos y de 28 años, quienes fueron asesinados con una bomba lapa situada en los bajos de su coche.
Refuerzo de la seguridad
Pese a la última acción terrorista de ETA, que se produjo en un municipio costero ubicado a escasos ocho kilómetros de la residencia estival de Sus Majestades, el Palacio de Marivent, el delegado del Gobierno, Ramón Socías, ya resaltó el viernes que el atentado “no cambia nada” la previsión de la llegada de los Reyes, ya que, según recordó, como todos los años se ha reforzado la seguridad.
En esta línea, insistió en que la seguridad de la Familia Real está “garantizada”, si bien afirmó que es “consciente” de que la seguridad “cien por cien o riesgo cero son imposibles de alcanzar” y, por este motivo, “trabajamos para minimizar los riesgos en el mayor grado posible”.
Durante sus vacaciones, está previsto que como todos los años, Don Juan Carlos continúe con sus actividades de despacho y previsiblemente recibirá en audiencia a las autoridades locales. El hecho de que este año las vacaciones estivales de los Reyes se acorten en casi una quincena -solían trasladarse a Palma entre el 15 y 20 de julio- introducirá una nueva novedad en los despachos que el jefe del Estado tenía en Palma con el presidente del Gobierno. Si lo habitual era que fuesen dos en el Palacio de Marivent (uno en la segunda quincena de julio y otro en agosto) esta vez se reducirá a uno en agosto en Palma.
Actualmente, ya se encuentran en la Isla los Príncipes de Asturias, Don Felipe, y Doña Letizia y las Infantas, Doña Elena y Doña Cristina, así como el Duque de Palma, Iñaki Urdangarín. No obstante, la Reina y las Infantas se trasladarán este domingo a Grecia para asistir al bautizo del quinto hijo de Pablo de Grecia y de Marie Chantal Miller, llamado Arístides, y que será bautizado por el rito de la iglesia ortodoxa. Así, Pablo es el segundo hijo de los reyes Constantino y Ana María.
Por otra parte, el Príncipe de Asturias ya tiene programada una actividad oficial en agosto, debido a que el día 9 asistirá el 9 a la toma de posesión del presidente de Ecuador, Rafael Correa, en virtud de la nueva Constitución de este país.
Durante los últimos días, además de las Infantas e Iñaki Urdangarín, a quienes se les ha podido ver yendo a buscar a sus hijo al puerto de Calanova, en Mallorca, donde están asistiendo a clases de vela, también se encontraba en Palma la Reina, quien abandonó la isla para trasladarse en viaje oficial a las Islas Madeira.
Por su parte, los Príncipes de Asturias asistieron junto a los Duques de Palma el funeral celebrado el viernes en la Catedral de Palma en recuerdo por los dos guardias civiles asesinados ayer en Palmanova por una bomba de la banda terrorista ETA, y dieron el pésame a los familiares de los fallecidos. Asimismo, las Infantas Elena y Cristina e Iñaki Urdangarín visitaron por la mañana la capilla ardiente, situada en el Palacio de la Almudaina, para expresar su condolencia a las familias.