Achaca sus choques con el presidente a que a él le gusta ser aplaudido y ella aplaude poco
MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
La secretaria cuarta de la Mesa del Congreso, la 'popular' Celia Villalobos, ha acusado al presidente de la Cámara Baja, José Bono, de manipular y tergiversar sus palabras sobre los discapacitados y ha recalcado que lo que ella defendió en la reunión del órgano de gobierno de la institución esta mañana es que se deje de considerar a las personas con discapacidad como “tontitos”, como se hacía “en los años 40”.
En declaraciones en los pasillos del Congreso, Villalobos ha explicado que, en un momento en el que Bono se había ausentado de la reunión de la Mesa, ella planteó la necesidad de reformar el sistema de oposiciones de la Cámara que, como en el resto de concursos públicos, reserva un cupo especial para discapacitados.
“Lo que pido es que si hay cinco plazas y las ganan, para ellos, y que no hagan corralitos, porque eso es lo que se hacía en los año 40, cuando se distinguía entre listitos y tontitos; en los 40, no ahora”, ha puntualizado la que fuera ministra de Sanidad.
LA DEJÓ “CON LA PALABRA EN LA BOCA”
Al final de la reunión de la Mesa, con Bono ya presente, Villalobos volvió a sacar el tema y el presidente le reprochó el uso de la palabra “tontitos”. Cuando iba a explicarlo, el presidente optó por levantar la sesión dejándola “con la palabra en la boca” y sin poder defenderse de la acusación de falta de “sensibilidad social” que, según la diputada, le dedicó el presidente del Congreso.
“Desde luego, a mí clases de sensibilidad social el señor Bono no me va a dar porque yo no tengo una hípica, ni caballos, ni nada parecido, yo tengo una historia política en este país de entrega a los temas sociales, que a veces incluso me ha traído problemas”, ha sentenciado Villalobos.
Tras este incidente y el que minutos antes ambos habían mantenido también en la Mesa del Congreso a cuenta de la negativa del PSOE a tramitar una petición del PP para citar al fiscal general del Estado, Villalobos salió airada de la reunión y, cuando se encontró con su portavoz, llamó “fascista” a Bono en presencia de las cámaras de televisión.
En este punto, la ex ministra ha reiterado que usó el epíteto de “fascista” para referirse a Bono “como sinónimo de prepotente y arrogante”. “No lo podía explicar (como sinónimo) de tergiversador de lo que yo he dicho y de manipulador; no sabía que también lo fuera. Siento en el alma que demuestre tan claramente lo que realmente es”, ha zanjado la secretaria cuarta del Congreso.
A su juicio, sus conflictos con Bono, que son algo habitual esta legislatura en la Mesa del Congreso, se deben a que ella no le cae “precisamente bien” al presidente de la Cámara porque a él “le gusta el aplauso” y ella aplaude “poco”.
“Yo no estoy acostumbrada a este tipo de Presidencias, sino a Presidencias socialistas y 'populares' donde me he sentido representada por ellos porque han jugado muy bien su cargo institucional”, se justifica Villalobos.