LAS PALMAS DE GRAN CANARIA/MADRID, 26 (EUROPA PRESS)
La Comunidad Autónoma de Canarias es la región con la menor tasa de mortalidad con un total de 6,12 fallecimientos por cada mil habitantes, según datos extraídos del INE por la Asociación Nacional de Servicios Funerarios (Panasef) con motivo de la Festividad de Todos los Santos.
En el conjunto del país fallecieron un total de 383.486 personas, una cifra que supone un descenso del 0,7 por ciento respecto al año 2008, en el que fallecieron 384.198 personas.
En términos absolutos, tras Andalucía se sitúan Cataluña, con 60.072 defunciones, la Comunidad de Madrid, con 41.525, y la Comunidad Valenciana, con 40.578 fallecidos. Las comunidades que registraron un menor número de defunciones fueron las uniprovinciales como La Rioja con 2.755 fallecidos, Navarra con 5.248 y Cantabria con 5.643 defunciones.
La tasa bruta de mortalidad en España fue en 2009 del 8,35 por mil con un descenso del 1,42 por mil respecto al año 2008, año en el que dicha tasa se situó en el 8,47 por mil.
Las tasas de mortalidad más elevadas se registraron, como sigue siendo habitual, en Asturias (12,08 por mil), Galicia (11,04 por mil), Castilla y León (10,67 por mil) y en Aragón (10,02 por mil). Por el contrario, Canarias (6,12 por mil), Madrid (6,59 por mil), Murcia (7,19 por mil) y Andalucía, con la mencionada 7,93 por mil fueron las comunidades con una menor tasa de mortalidad.
Aunque no existen datos oficiales al respecto, Panasef ha podido comprobar que las cremaciones siguen aumentando en nuestro país. En 2009, se estima que cerca del 32 por ciento del total de las personas fallecidas fueron incineradas. Este porcentaje es muy superior en las grandes ciudades, pudiéndose citar los ejemplos de Sevilla y Málaga, donde la tasa de cremación supera el 50 por ciento.
La crisis económica también está afectando a las empresas funerarias. Así, el presidente de Panasef, Juan Vicente Sánchez Araña, manifiesta que “las familias españolas están reduciendo sus gastos en esquelas y en coronas de flores debido a la crisis que está sufriendo el país. La crisis también se hace notar en las cremaciones, que continúan creciendo ya que una práctica más económica que el entierro tradicional”.