Pedro Medina, presidente insular del CCN y consejero del Cabildo Insular de La Gomera, “fiel a su peculiar estilo de hacer política en toda su trayectoria” reitera la dimisión “urgente e irrevocable de Casimiro Curbelo como presidente del Cabildo Insular de La Gomera”, por “abandonar” la Isla mientras el fuego se encontraba activo. Y avanza que va a poner los hechos “en conocimiento del Juzgado de Instrucción de San Sebastián en los próximos días”.
“El pueblo gomero no merece de presidente a un señor, cuya actuación, está más acorde a la de un pirómano que a la de un gobernante, que antepone sus vacaciones y se marcha de la isla dejándola azotada por las llamas”, asegura en un comunicado. Así, detalla Pedro Medina, tras iniciarse el fuego, el día 4 de agosto, “sobre las 14:00 horas de la tarde el presidente, acompañado de algunos miembros de su familia, se fue a Tenerife en un BMW conducido por su chófer, en el Ferry de Naviera Armas”. Continúa relatando que “a las 17:00 horas cogió un avión rumbo a Málaga, dónde pensaba disfrutar de la Feria de Malaga, dejando atrás una Isla que estaba siendo arrasada por las llamas”.
Medina asegura que Curbelo, mientras estaba “fuera” de la Isla, “se enojaba porque recibía multitud de llamadas diciéndole que La Gomera ardía, se irritaba porque pedían su consejo sobre qué hacer ante esa situación tan espeluznantemente angustiosa”, y que dijo que “si el incendio se complicaba e iba a más, se lo comunicaran a Paulino y su séquito, porque él estaba de vacaciones”. Y añade que afirmó que “le dejaran en paz, que le estaban volviendo loco”.
Cuando el fuego “se fue de las manos, el presidente, no tuvo más remedio que regresar y una vez controlado, pero no extinguido, su cabeza estaba de vacaciones, de modo que, el día 8, anunció, que el incendio forestal que se declaró en la isla el pasado el día 4 está acotado y estabilizado” , y declaró a los periodistas, que“ el incendio pasa del nivel dos al uno, lo que significa que el Cabildo asume la dirección del control y extinción del fuego”.
El consejero centrista responde a las críticas de los socialistas gomeros sobre que no había mostrado interés por la tragedia, que “entre atención médica y atención médica en el Hospital Universitario seguí segundo a segundo todo lo que acontecía en mi Isla, recibiendo toda la información de multitud de amigos directamente y a través de las redes sociales, que los socialistas tanto vilipendian”. Y si no llamó a los responsables institucionales es porque “estoy cansado de sus mentiras y falacias”.