El secretario general de la Federación Ecologista Ben Magec, Fran Castro, aseguró este martes que los parlamentarios autonómicos pretenden “darle la estocada final a la protección de la naturaleza y los valores tradicionales de Canarias”. Castro acudió este martes disfrazado de rey mago, junto a otros dos compañeros de la asociación al Parlamento de Canarias para llevar regalos a quienes “pretenden seguir legislando, aprobando leyes que favorezcan la total destrucción” de la naturaleza en las Islas.
Estos particulares reyes magos llevaron a cada uno de los 60 parlamentarios lo que han pedido para el 2010, según ellos, “seguir destruyendo y favoreciendo la desprotección de todos los valores naturales”. Para ello llevaron una muestra de esto. Por un lado desprotección del suelo rústico, “simbolizado a través de proyectos que solo sirven para despilfarrar dinero público, como el anillo insular o el tren del Sur y del Norte”. Estos proyectos, “no sólo van a afectar a espacios naturales, sino a espacios agrícolas de gran valor, paisajisticamente muy importantes”.
Los reyes magos ecologistas también llevaron al Parlamento una muestra de una montaña majorera, “muy útil para seguir especulando, como Tindaya y Tebeto”. Por último, llevaron frascos “de conserva de especies desprotegidas”. En este sentido también acudieron con un panel, “que será el único lugar en el que puedan estar una vez las desprotejan”.
Desde Ben Magec piden medidas de protección y conservación “en vez de legislar para seguir destruyendo”. Los ecologistas creen que, “con la Ley de Medidas Urgentes, el nuevo Catálogo de Especies Protegidas que quieren aprobar en 2010 y otros proyectos devastadores se le está dando la estocada final a todos los valores que tenemos y aún conservamos en Canarias”.
Los ecologistas anuncian que seguirán luchando “hasta conseguir que retiren la propuesta de ley del catálogo”. Así, recuerdan como a nivel canario, ya el mundo científico se ha pronunciado, “entre ellos los mayores expertos en conservación de especies protegidas que han dicho que es una aberración”. Sin embargo, indican que “también a nivel internacional han aparecido voces muy significativas que están presionando para que el Parlamento de Canarias no se atreva a crear un precedente tan horroroso como crear una ley para aprobar determinado proyecto”, en referencia al puerto de Granadilla.