El grupo Popular en el Parlamento de Canarias intentó este miércoles sin éxito convencer al PSOE de que apoyara en el pleno de la cámara su propuesta de reprobación de la consejera Inés Rojas por su gestión de la dependencia, iniciativa que fue rechazada con los votos socialistas y nacionalistas, mientras que el grupo mixto se abstuvo.
Milagros Bethencourt, diputada del PP, emplazó directamente a los diputados socialistas a hacer público con su voto lo que dicen en privado, y les instó a buscar a un sustituto responsable a Inés Rojas como consejera de Cultura, Deportes, Políticas Sociales y Vivienda, para así dar una oportunidad a los dependientes en el año que queda de legislatura.
Pero Rosa Guadalupe Jerez, del PSOE, dijo a los populares que no tienen autoridad moral para reprobar a Inés Rojas porque es el Gobierno central el que “se ha ido cargando el sistema”.
La representante del PSOE dijo que Canarias ha aumentado en 2013 y 2014 sus presupuestos para dependencia y recordó que Paulino Rivero se ha comprometido a incrementarlo más si se consiguen mejoras en el sistema de financiación.
Previamente, Milagros Bethencourt señaló que “es un secreto a voces” que Inés Rojas solamente sigue en su puesto por la necesidad de Paulino Rivero de mantener el apoyo político de CC en Lanzarote, pero advirtió de que la responsabilidad de los diputados es pensar en los dependientes que padecen la gestión de la consejera, no en cuestiones partidistas.
Por eso instó al PSOE a contribuir a cambiar a la consejera y a no hacerse responsable de su continuidad, cuando antes de llegar al Gobierno ya calificaban de nefasta la gestión de Inés Rojas, “algo que no ha cambiado”, dijo.
Reconoció que el PP apoyó a Inés Rojas cuando empezó a aplicarse la ley de dependencia, pero “pasados siete años se ha acabado el tiempo de espera”.
El Consejo Económico y Social, el Diputado del Común, la Defensora del Pueblo, el Observatorio Nacional de la Dependencia y el Tribunal de Cuentas no pueden estar todos equivocados “cuando coinciden en que la situación es desoladora”, afirmó.
Recordó que en siete años ha habido 57.000 solicitudes para entrar en el sistema de dependencia, solamente 11.500 personas están atendidas, 46.000 están en lista de espera y 8.000 han fallecido sin respuesta.
José Miguel Barragán, del grupo nacionalista, acusó al PP de centrarse en atacar a una persona en lugar de analizar los problemas de fondo de la política de dependencia, que son comunes en todas las comunidades autónomas, dijo.
“La reprobación de las personas no es la solución”, porque entonces habría que reprobar a los consejeros de asuntos sociales en todas las comunidades, dijo Barragán, quien admitió que hay cosas que mejorar.
Román Rodríguez, portavoz de Nueva Canarias, planteó que en vez de reprobar a la consejera habría que reprobar las políticas sociales del Gobierno de Canarias, pero su enmienda no fue admitida por el PP.
Rodríguez dijo que el PP tiene responsabilidad en el retroceso en la dependencia por haber aplicado recortes y aplazado el calendario de aplicación, aunque enfatizó que las políticas sociales no son tampoco una prioridad para el Gobierno de Canarias.
La responsabilidad es del conjunto del Gobierno de Canarias, que ha sido poco sensible con la pobreza, la dependencia, el empleo social y la vivienda, denunció.