Cantante o estrella del rock fueron sus primeras opciones cuando era pequeña. Pero con el tiempo, su actitud guerrera la condujo por un camino distinto. Laura Fuentes Vega, candidata a la Coordinación General de Podemos Canarias, siempre estuvo comprometida con la transformación social. “Recuerdo que en el instituto no nos ponían un docente sustituto y teníamos muchas horas libres. Nos manifestábamos porque no queríamos estar sin hacer nada”. Al luchar desde su municipio, Los Realejos, encontró algunas limitaciones, y nunca pensó en dedicarse a la política y, mucho menos, ser directora general, puesto que ocupa en la actualidad al ser responsable de la Dirección General de Juventud del Gobierno de Canarias. Descartaba estudiar Derecho como sus padres. Pensó en la Filosofía y en el Periodismo, pero terminó decantándose por la Sociología. Al final de su carrera, terminó peleada con la política. “Me di cuenta de que lo que se hacía en España era todo mentira. Era todo lo contrario a lo que yo había estudiado en mis libros”. Se marchó de Canarias para estudiar un máster y al volver no encontró ninguna oportunidad laboral. “Trabajé dando clases partículares, sirviendo bocadillos y en todo lo que encontraba”. Hasta que nació Podemos.
Laura Fuentes se había aproximado a Izquierda Unida y al PSOE, pero no se sentía del todo representada. Sin embargo, tal y como ha confesado en una entrevista concedida a Canarias Ahora, escuchar a Pablo Iglesias o a Juan Carlos Monedero tras el 15M le hizo volver a confiar en la política. “Esto es lo mío, pensé”. Entonces, se aproximó a Podemos. “He puesto sillas, he colgado tweets, he hecho de todo porque lo que quiero es trabajar”. Desde 2015 es secretaria de comunicación del partido, y este lunes ha anunciado un paso mayor, su candidatura a la Coordinación General de la formación política en el Archipiélago. La juventud, el feminismo, el ecologismo, la diversidad y el espíritu transformador son los principios que rigen su candidatura: “La gente joven tiene una capacidad de lucha muy grande y nunca se le ha dado ni voz ni espacio. Ahora toca que la gente joven se haga responsable del futuro que nos viene”.
¿Qué puede aportar un espíritu joven al panorama político actual?
Lo tengo súper claro. Una frescura y una sangre nueva muy necesaria. Yo en estos años he visto que eso que nosotros llamamos vieja política es más que real. Puedo ponerme de acuerdo con más facilidad con gente de mi generación de cualquier bando o color político porque tenemos metas. Hay cosas que todos y todas hemos sufrido en nuestras propias carnes. A veces cuando ves a gente mayor diciendo cosas, no lo hacen porque lo hayan sufrido. La mayoría de mi generación nos las hemos visto y deseado. No digo que de generaciones precedentes no, pero en nuestro caso la lucha ha sido distinta, la crisis se ha vivido de manera distinta, las relaciones familiares, sociales.... La sociedad no es la misma que la de la vieja izquierda. Creo que la gente joven se centra en conseguir objetivos. Uno intenta ser lo más práctico posible, intentas conseguir mejoras en realidades, derechos y libertades. Necesitamos ir consiguiendo pequeñas victorias y conquistas en lugar de centrarnos en que todo sea como yo digo o como mi ideología me dice. La gente joven tiene una capacidad de lucha muy grande y nunca se le ha dado ni voz ni espacio. Ahora toca que la gente joven se haga responsable del futuro que nos viene.
¿Cuáles son los principales problemas para la juventud canaria?
Para mí en Canarias lo más preocupante es el empleo. No solo no conseguir empleo, porque hemos sido una de las regiones con más paro juvenil de España, sino también por los empleos pobres y precarios para las personas de entre 25 y 35 años. Un margen de edad en el que se supone que nos tenemos que emancipar o tener hijos si queremos tenerlos. Entonces, si el mayor problema de tu vida es que ni siquiera tienes autonomía ni recursos económicos para alcanzarla no te puedes desarrollar. A veces es imposible luchar porque no te lo permite tu puesto de trabajo. Obviamente las dificultades formativas y tener limitaciones formativas también. Cualquier máster no está en Canarias, tampoco cualquier carrera. Tener un modelo económico que no está hecho para integrar toda la gente que sacamos de Formación Profesional o de la Universidad... Nuestro modelo económico está tan basado en el turismo que encontramos a científicos poniendo cervezas en un bar. Igual el mayor problema es que tenemos que empezar a cambiar el modelo económico para integrar a toda esa gente, sino la fuga de cerebros continuará. Es un drama para Canarias, para quien ha invertido dinero para escolarizar a toda esa gente. Tiene una titulación pero quien saca provecho es un Estado que no ha invertido ni un euro en esa persona. Algo a lo que se suma la dificultad familiar.
¿Cómo puede evitarse esa fuga de cerebros?fuga de cerebros?
Cambiando el modelo. Si desde la administración pública se contrata gente, se abren mecanismos para integrar a gente. Las universidades también deben contratar para que los jóvenes investiguen. Canarias debería ser un foco para investigar las energías renovables. Lo somos en el ámbito astrofísico y deberíamos aprovecharlo en otras ramas, porque somos un paraíso. La única fórmula es cuidar mucho más eso frente a que vengan grandes empresas aquí para precarizar a trabajadores en condiciones de servidumbre o pésimas.
¿Servirá la pandemia para poner en valor la protección medioambiental frente al turismo masivo?
Es obligatorio que nos sirva. Pero si la sociedad y los partidos políticos, incluido Podemos, permitimos que se nos olvide, pecaremos el doble. Es la oportunidad perfecta para ver a simple vista las mejoras hasta en nuestros propios mares. A mí me da mucho miedo el tema de los guantes y las mascarillas que vemos en la calle. Podemos tiene que enfrentarse, igual que la sociedad canaria se ha enfrentado ahora para no construir un muro de cemento en La Tejita, dentro y fuera del Gobierno contra un modelo desarrollista y continuista que no puede perdurar. Lo sabe toda Canarias. Por mucho que tengas trabajo siendo camarera de piso o trabajando en un hotel, es pan para hoy y hambre para mañana. Necesitamos que la gente venga aquí y gaste. El cemento, el piche y el low cost no hacen que las Islas sean un lugar para quedarse.
En el anuncio de su candidatura, apuesta por un Podemos feminista y diverso. ¿Ha conseguido la extrema derecha instaurar en la sociedad canaria un rechazo hacia estas luchas?
Creo que Canarias es un espacio mucho más abierto y de más aceptación que otros lugares. A veces vemos esos espacios de odio en Twitter, pero las vemos fuera de nuestro mapa y me alegro de que sea así. Pero no podemos permanecer ajenos a sucesos en una guagua, pintadas en una calle de La Palma, insultos a compañeros de colectivos en zonas rurales o islas no capitalinas... Creo que es papel de la juventud y de toda la sociedad canaria echarle mucha cara a esto. No permitir que esos discursos que incluso se llega a normalizar que existan entren en las Islas. Aquí no puede haber cabida para eso. No somos una tierra de machismo, pero sí somos una tierra donde muchas mujeres siguen siendo asesinadas por sus parejas. Es una lacra que nuestra generación igual es mucho más consciente. Los derechos y libertades se entienden como dados y parece que nunca nos lo van a quitar, pero resulta que no es extraño que llegue cualquiera y de un día para otro decida recortarlos. Hace falta recordar que los derechos que tenemos no están en todos los lugares.
¿La política canaria es paritaria y feminista?
No. No lo creo. Está empezando a verse una luz. Ahora hay más mujeres que hace diez años y probablemente algunas más que en la legislatura pasada. Nuestro Gobierno y nuestra Consejería (Derechos Sociales) tiene muchas más mujeres que hombres. Ponemos más en el asador que otros partidos u otras instituciones. Hacemos nuestra parte, pero sí creo que falta compromiso. El día que tengamos una presidenta del Gobierno de Canarias te diré que somos un lugar más paritario. O cuando tengamos más mujeres que hombres no por ser paritario, sino porque son las mejores personas para estar ahí. No olvidemos que que haya una mujer presidenta o vicepresidenta no quiere decir que sea feminista por ser mujer. Hay un plus de conseguir que las mujeres que ocupen puestos de poder tengan muy claras las posiciones de privilegio que han tenido los hombres. La política no está acostumbrada a ponernos más que como floreros. Ahora está de moda para la foto. Pero la política es tener herramientas y dar un servicio en base a esa política feminista. Al Gobierno le falta mucho de cuidado. Hace falta tener políticos y políticas feministas.
¿Cómo valora la gestión migratoria que está haciendo Canarias?
Canarias es y debe ser tierra de acogida. Lo digo mucho en Juventud porque es transversal y tocamos muchos temas. Cuando en 2008 yo estaba en el instituto y llegaban pateras se hablaba mucho del tema y la gente era muy abierta. A veces oigo ciertas cosas como “nos vienen a quitar el trabajo” y yo digo, “¿pero qué trabajo? si lo que hacen no querrías hacerlo tú”. Creo que nos dejamos llevar por lo que se dice en Twitter y Canarias no es eso. Canarias siempre ha sido una tierra migrante. Tuvimos que irnos a Venezuela y en 2015 mucha gente tuvo que irse a Alemania o a Reino Unido porque no tenían oportunidades para trabajar en Canarias. Me apena cuando no se hacen las cosas suficientes desde el Gobierno estatal para que las personas que llegan estén en condiciones dignas. No puedo ver un pabellón con gente durmiendo en el suelo y sentir que lo estamos haciendo bien. Como Consejería, tenemos las competencias cuando son jóvenes y menores de edad. Me consta que son personas bien atendidas y en muchísimos recursos para que sea así. Además, estamos en contra de los CIE. Abogamos porque se reconviertan, reestructurar el espacio para que no sea una cárcel. Seguro que va a costar menos dinero que cuando tenemos que adaptar un recurso. A veces la gente que llega ni siquiera quiere quedarse aquí, sino ir a Europa.
¿Cómo han reaccionado los compañeros y compañeras de partido a su candidatura?
Empecé en el círculo de Los Realejos y sigo asistiendo cuando puedo. Lo que hice fue ir allí y decirles que he pensado en dar un salto mayor porque no quiero tirar por la borda el trabajo que se lleva haciendo tantos años. Un Podemos que para mí es una herramienta real. Vi que se acercaban las primarias y que alguien tenía que dar el paso. Si compañeros y compañeras mías me empujan y no me dejan tirarme sola, uno lo hace con más ganas. Fue sorprendente porque hablé con compañeros de todas las Islas y vi la ilusión del primer día. Ahora con más experiencia. Yo no vengo aquí para hacer un equipo laurista y crear una corriente, yo quiero gente que trabaje. He llamado a gente, el equipo no está cerrado ni mucho menos. Creo que hay que darle un papel fundamental a los municipios, que muchas veces son los que se parten la cara. Lo sé de primera mano porque he recorrido a pie los municipios poniendo panfletos. Ni hay dinero ni somos un partido que contrata a nadie para hacer eso.
¿Quién formará parte de ese equipo?
Me gustaría tener cerca a Meri Pita, Noemí Santana, Alberto Rodríguez, Victoria Rosell... Tenemos gente muy potente en muchos sitios haciendo muchas cosas y a veces no damos a basto con tanto que queremos hacer. Lo importante es que no perdamos ese contacto y que tengamos ese espacio de construcción positiva.