Curtido en mil batallas y con motor de bajo consumo, Antonio González Viéitez es en la actualidad una de las voces más destacadas de la sociedad civil canaria. Economista, ex consejero de Política Territorial y miembro del Foro Canario Alternativo, afronta desde hace semanas un objetivo que se toma muy en serio: evitar que Repsol, ya con el permiso de Madrid en la mano, realice las prospecciones petrolíferas frente a las costas de Fuerteventura y Lanzarote.
Su andar estos días es frenético: ayer en Tenerife, hoy en Gran Canaria, mañana quién sabe, para explicar su convicción de que el petróleo no es la solución para Canarias, ni siquiera para contrarrestar un paro que alcanza al 30% de la población activa. Y el sábado 24, comenta, estará en alguna de las ocho manifestaciones contra las prospecciones que se realizarán en Canarias, Madrid y Barcelona.
El pasado martes participó en una charla en el Gabinete Literario, donde expuso su punto de vista más allá del debate sobre petróleo sí o no. “Si hace solo dos semanas estábamos hablando del modelo energético”, se queja. Avisa que habrá un conflicto Canarias-Estado que pondrá las sensibilidades nacionalistas a flor de piel.
¿Por qué no al petróleo?
El tema consiste en encuadrar el escenario, y eso es hablar del modelo energético. Tenemos el tradicional, con el petróleo, que ha marcado el siglo XX: consumir a ultranza, con la tremenda concentración del poder petrolero en este aspecto. Es sucio, contaminante y está machacando la biosfera. Es la expresión del cambio climático. Ahí aparece el nuevo modelo, donde la producción y el consumo está distribuido por todo el mundo. Y sobre todo es limpio. Aquí es donde tenemos que analizar qué sentido tiene apostar por un componente esencial del modelo viejo, cuando Canarias tiene una dotación de factores que la hacen la Arabia Saudí de las energías renovables.
Con el paro que hay en las Islas, ¿no convienen las prospecciones aunque sea para crear empleo durante unos años?
La primera cifra de puestos de trabajo que Repsol dio aquí fue de 55.000, cuando en todo el mundo tiene 37.000 trabajadores. Si se las deja funcionar, las energías limpias crean muchísimos más trabajos que el petróleo. Las posibilidades de empleo y tejido industrial son 20 veces mayores con nuestros recursos renovabes, que los tenemos y no los estamos aprovechando.
Pero las renovables parece que no terminan de arrancar
Están previendo una regasificadora en el sur de Gran Canaria. Si se realiza una inversión en un artilugio grande, que es el modelo viejo, el grandismo, hacen falta 15 años para amortizarla. En ese tiempo lo que no quieren es que haya energías limpias que compitan con aquella. Porque si hay energías limpias, lo otro, que es más caro, tendrá dificultades para amortizarse. Cualquier operación no debe dificultar la incorporación del nuevo modelo ni facilitar el viejo. Y cuando se produzcan coyunturas con dificultades energéticas, que las habrá, existen unos artilugios de combustión con gasoil de última generación perfectamente modulables para cubrir la totalidad de la red.
Si las renovables crean más tejido industrial, ¿por qué las empresas no invierten más en ellas entonces?
Están comenzando a invertir. Lo que ocurre es que las grandes empresas están acostumbradas a especular y ganar cantidades ingentes de dinero.
Pero da la impresión que las energías limpias siempre dependen de la inversión pública
El director general del primer concurso eólico estuvo en la cárcel y tiene jucio pendiente. Era para 1.000 megavatios y se presentaban ofertas por 17 veces más potencia. Un chollo, porque el sistema convencional está obligado a comprarte las energías limpias que tú hagas, y además te las subvencionaban. Fue tal la avaricia que machacaron el concurso. El segundo tiene las mismas características, y está parado. El tema es cuáles son los intereses del petróleo, en las próximas semanas veremos la campaña publicitaria. El sábado 24 hay manifestación en Lanzarote y Fuerteventura, y ya están llegando aquí los ejecutivos de Repsol para comprar al lucero del alba.
¿Qué va a pasar?
Políticamente hay un tema muy grave. Parlamento, Gobierno, cabildos y ayuntamientos están diciendo no a las energías viejas y sí a las limpias.
¿Pero no está habiendo cierto oportunismo? Ahora todo el mundo es ecologista
Los empresarios ni hablar. El presidente del Cabildo grancanario dice que mientras las prospecciones sean en Lanzarote y Fuerteventura, bendito sea. Pero que un ministro canario comience a ser desleal y a tratar de mala manera a las instituciones canarias, es algo de una enorme gravedad.
¿Se las ha tratado mal?
Hasta que entró este Gobierno, el acuerdo era no comenzar las prospecciones hasta que hubiera acuerdo entre Canarias y el Estado. Es tal la presión del dinero que han arrasado con cualquier tipo de decencia política. En el corredor Valencia-Baleares, que están en las mismas condiciones, no se les ha impuesto ningún tipo de prospección. Cuando uno percibe que el ministro habla del interés de España, cuando realmente es el interés de la Península, está adentrándose en un mar muy peligroso y poniendo un montón de sensibilidades en el disparadero.
¿Por qué cree que se han dado tanta prisa en dar los permisos a Repsol?
Es el abc de la política. Cuando un gobierno entra y tiene que tomar medidas desagradables, lo tiene que hacer en los primeros seis meses. Pero en este caso ha sido un enfrentamiento desleal, exclusivo de este Gobierno. Es un elemento que puede traer consecuencias insospechadas para esta plana mayor. Y chico, si nos tratan así, no tenemos razón para ser de ustedes. Así de claro. Estamos hablando de la columna vertebral de la sociedad canaria, de su economía, de su empleo y sus recursos. Y estamos siendo maltratados por una metrópoli que no tiene en cuenta esos planteamientos.
¿Se va a producir una confrontación institucional entre Canarias y Estado?
Probablemente. ¿Qué otra cosa puede haber con un tratamiento tan despótico, rencoroso diría yo, con la sociedad canaria? Claro que va a haber enfrentamiento.
Gran parte de los empresarios no se ha pronunciado...
La Confederación Canaria de Empresarios dice que está privada.
...pero muchos y muy importantes son del sector turístico, que podrían resultar afectados por un vertido
El sector de Lanzarote y Fuerteventura está con reparos, porque no le gusta ir contra el ministro y el Gobierno. ¿Pero el empresariado de Tenerife y Gran Canaria? Que pa'lante.
¿No es un poco egoísta eso?
No solo egoísta, sino que no tienen dos dedos de frente. Son torpes. En Canarias hay unas posibilidades excepcionales de desarrollo, crecimiento y empleo, las que dije antes, y están tirándolas por el vertedero.
¿Somos aquí más dados a pensar solo a corto plazo?
La dirigencia canaria se ha caracterizado por ser cortoplacista, como todo especulador. Tienes que ganar mínimo dos dígitos por tu inversión. Si no, eres un totorota. Y aquí se ha ganado dos y tres dígitos. Lo que quieren en este momento es repetirlo, y ahí están 150.000 nuevas plazas hoteleras. El territorio se va a poner otra vez para que haya barra libre para toda esta gente. Lo que quieren hacer es eso, pero los de Lanzarote y Fuerteventura no.
Usted estuvo en política, ¿si mañana le nombraran ministro de Industria, qué medidas tomaría al respecto?
Con el Gobierno del Estado, mantener que si no hay acuerdo, no hay ningún tipo de actuación. Y segundo, intentar poner el marcha el modelo energético limpio. Son recursos nuestros, que tienes que consumirlos aquí. Todo el mundo se llena la boca con el desarrollo endógeno, y esto es desarrollo endógeno. La calidad y la excelencia turística están en que el destino sea limpio e impecable. No hay mayor ventaja comparativa que ofrecer un destino en vías de ser libre de contaminación y sostenible cien por cien.