María Del Mar Julios desvela en la descripción de su perfil de Facebook que “estudió en Universidad de Las Palmas de Gran Canaria”, ciudad en la que vive y en la que nació un 28 de septiembre de 1958. Incide por tanto en ese pobre uso de la presentación en que los candidatos en general incurren todavía. Una oportunidad perdida para resumir quiénes son y cómo se proyectan.
La foto del perfil la presenta en plano largo y de perfil, en una intervención parlamentaria, por lo que tampoco este elemento ayuda mucho a acercarse a la candidata ni a mostrarse próxima a los más de 5.000 amigos que se han sumado para seguirla en la red. La mayor parte de las 336 fotos subidas al perfil son las mismas que se pueden ver en el resto de páginas y perfiles de los candidatos de Coalición Canaria en Gran Canaria.
La voz digital de María del Mar es lejana e impersonal. Como muestra, el 8 de marzo, día de la mujer, cuando se limita a un escueto: “Felicidades a todas las mujeres en este día tan especial”. Lo habitual es que Julios haga referencias informativas sobre los actos en los que va a participar: “Asisto a la misa del día del Patrón de los bomberos”, informa ese mismo día.
No se le observa en diálogo con los internautas que dejan comentarios en su muro, ni participa en el hilo de las escasas conversaciones que se propician, ni se muestra agradecida ante los distintos comentarios que los amigos incorporan sin moderación al muro, como cuando Mónica Núñez Escobar la saluda con un inquietante “Que dios te bendiga, con muchisima mas sabiduria” (sic).
Su forma de ratificar que hay vida y reacción ante los distintos comentaros es a través del pulgar: me gusta esto. Y así, si Ricardo Barbato Rotundo dice, haciendo gala a su segundo apellido, que “Eso es hacer politica!!!!!!, siempre estas al lado del ciudadano, cuestion poco comun en esta epoca, segui adelante no cambies nunca, Dios te premia!!!!!!” (sic), pues a María Del Mar Julios le gusta esto.
Sin mucho más que “rascar”, saltando a la web nacionalista, ya que Julios carece por ahora de una web o blog propios, se le puede ver con una colorista chaqueta encarnada sobre una blusa de llamativo estampado. Aparece justo entre Fernando Bañolas y Jorge Rodríguez -candidatos al Cabildo y Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, respectivamente- y así tiene pinta de continuar durante toda la campaña: como la del medio de Los Chichos.
No se ponen de acuerdo con su nombre. En el perfil de Facebook aparece como María Del Mar; en la entrada de la web, como Mari Mar, y en su interior, Mª del Mar. Como sucede con Bañolas o Rodríguez, es inútil buscar profundizar en sus identidades, más allá de impersonales noticias de partido y actos.
En otra red social, en el canal de You Tube del partido, aparece encabezando el canal: “María del Mar Julios explica el acuerdo alcanzado para contratar 2.000 desempleados”, el último de los 49 vídeos protagonizados. Hay que remontarse hasta el año 2008 para encontrar el que más reproducciones tiene (378), un vídeo de Acfi Press en la campaña de las legislativas del 2008: “”El nacionalismo en esta tierra tiene muchos enemigos“, decía entonces.
¿Se ha dicho que María del Mar no tiene cuenta de Twitter?