Unión Sindical de Policía acusa a Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria de crear alarma sobre nóminas trabajadores

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 14 (EUROPA PRESS)

La Unión Sindical de la Policía (USP), el sindicato mayoritario en la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria, ha acusado al equipo de gobierno del Ayuntamiento de la capital grancanaria de crear “alarma social” con sus declaraciones sobre la situación económica del consistorio y del “peligro o riesgo que corre el pago de las nominas”.

Para la USP todo ello tiene como “único propósito intentar justificar el desmantelamiento de ciertas unidades o servicios para ahorrarse gastos reduciéndolo del sueldo de los trabajadores para después, como ya nos tienen acostumbrados, gastarlo en fiesta o en actividades que no son necesarias o esenciales” para el ciudadano.

De todos modos, el sindicato ha tranquilizado, en un comunicado, a los trabajadores municipales recordándoles que las nominas “están garantizadas pues las mismas son presupuestadas cada año y fiscalizadas a posteriori por el interventor, tesorero y secretario, todos ellos funcionarios seleccionados por el estado que desempeñan la función de control y de fe pública” en el Ayuntamiento.

“Ellos hacen cumplir fielmente con el control y la fiscalización interna de la gestión económico-financiera y presupuestaria, y la contabilidad, tesorería y recaudación”, recuerdan.

Por otro lado, USP también ha solicitado “cordura política para mantener la estabilidad presupuestaria en aras de seguir dando los servicios que actualmente se está dando al pueblo y no generar agravios” a los trabajadores que “ya han visto mermados sus sueldos como para aún bajárselos más con el único despropósito de desvestir a un santo para vestir a otros”.

Finalmente, criticaron la actitud del alcalde, Juan José Cardona, que “por un lado exige profesionalidad a los trabajadores y esmero, por otro hipoteca el futuro formativo de éstos, eliminando la partida municipal destinada a tal fin alegando razones económicas, no justificadas en su conjunto”, ya que insisten que si esto debe hacerse, también tiene que repercutir en “menos fiestas o actividades que no son necesarias o esenciales”.