Sentido Común rechaza la política fiscal de LPGC

El Partido del Sentido Común rechaza la política fiscal llevada a cabo en Las Palmas de Gran Canaria, “que ha supuesto la mayor subida de impuestos a los ciudadanos de a pie que se ha producido en el Ayuntamiento capitalino, con incrementos espectaculares para mantener una actividad que no ha mejorado la prestación de servicios a los ciudadanos y escudándose en el la necesidad de mantener los servicios esenciales, mientras destina cientos de miles de euros para gastos suntuarios y sin rendir cuentas a la ciudadanía, sobre todo en el área que preside, la Concejalía de Cultura, donde se ha derrochado dinero a dedo y sin concurso público”.

La formación de Aurelio Ayala destaca que el IBI, el agua, los transportes, los vados, las escuelas municipales, los parquímetros (que el Ayuntamiento retiró y recientemente volvió a implantarlos), y un largo etcétera de medidas fiscales “estrangulan a la ciudadanía, a las que ha que sumar el anuncio de la reinstauración de la tasa de basuras”.

En su opinión, el alcalde Jerónimo Saavedra “no deja de utilizar fondos públicos para su campaña personal, con la contratación de cientos de personas para una 'lavada de cara' de la ciudad con la excusa de que vienen el jurado que decidirá qué ciudad española será capital europea de la cultura en 2016”.

El Partido del Sentido Común se compromete a defender los servicios públicos “y la transparencia y concurrencia en igualdad de oportunidades para las empresas que puedan prestar servicios que precise el Ayuntamiento. Procurará el ahorro por encima de la subida de impuestos y fomentará el apoyo a las empresas (PYMES y autónomos) que generan casi la totalidad del empleo estable en esta ciudad, frente al amiguismo y al enchufismo, con una política fiscal de reducción de impuestos a los más desfavorecidos y a los sectores que generen empleo y riqueza en la ciudad”.