Robots educativos “para jugar” de la Plataforma Oceánica de Canarias acaban en la Guardia Real
La Plataforma Oceánica de Canarias (Plocan) regaló dos robots submarinos de control remoto a la Familia Real después de que Felipe VI y Leticia Ortiz visitasen las instalaciones del Consorcio Público en Telde (Gran Canaria) el 24 de abril de 2017 guiados por el director del organismo Octavio Llinás. El profesor explicó a los reyes para qué sirven esos objetos, y así se recoge en un vídeo publicado por la Casa Real: “Son solo para jugar”.
Se trata de dos equipos, de un valor aproximado de 100 euros, que se desarrollan en el marco de un proyecto colaborativo con los centros educativos isleños llamado Edurovs, que busca fomentar el interés de los alumnos por la ciencia y la tecnología mediante la fabricación de robótica y que han sido finalmente destinados a la unidad de buceo de la Guardia Real.
Desde enero de 2015 la Casa Real da a conocer todos los regalos que recibe año a año con motivo de algún acto oficial o en razón de su condición, tras la normativa impulsada por Felipe VI para dotar de mayor transparencia a la monarquía española. En el listado aparecen otros obsequios en su visita a las Islas del 24 de abril: un sello y un sobre conmemorando la aviación humanitaria cuando los reyes visitaron la sede del centro de cooperación con África de Cruz Roja, o una figura de un músico cuando asistieron a la presentación del proyecto Barrios Orquestados. Sin embargo, en dicho documento no aparece el regalo de los dos equipos Edurovs.
El Portal de Transparencia del Gobierno de España, en respuesta a una pregunta de este periódico, informa de que “con posterioridad al viaje oficial y mediante carta de fecha 4 de julio de 2017, el director de Plocan envió a la Casa de Su Majestad el Rey dos equipos Edurovs que, en atención a sus características técnicas, fueron depositados en la Guardia Real a disposición de su unidad de buceo”. Desde Plocan, también consultado por este medio, constatan la entrega de los dos kits especificando cada pieza, pero no explican qué motivó hacer este regalo en concreto.
Según el Portal de Transparencia, dos robots submarinos de un proyecto educativo que elaboran alumnos de entre 10 a 18 años con “materiales de uso cotidiano fácilmente accesible y económico”, como especifica Plocan en su página web, han sido destinados a la unidad de buceo de la Guardia Real. Durante el vídeo publicado por La Zarzuela sobre la visita de Felipe VI y Letizia Ortiz a las instalaciones de Plocan en Taliarte (Telde), el director del consorcio público, Octavio Llinás, les muestra durante una parte del recorrido una piscina con los robots submarinos de los alumnos, destacando que “son solo para jugar” y, en otro momento, añade Llinás que él también tiene hijas, en referencia a la princesa Leonor y la infanta Sofía.
El proyecto, cuyo nombre completo es Taller para la atracción y motivación de escolares en secundaria hacia la ingeniería mediante la construcción y operación remota de vehículos submarinos, está financiado con fondos del Estado y del Cabildo de Gran Canaria, además de otras entidades privadas. Al finalizar el curso académico de los alumnos que participan, de Secundaria, Bachillerato, Ciclos Formativos, Grados Medios o Superiores y Formación Profesional, todos se reúnen en un encuentro que les permiten conocer los trabajos de los demás.
El profesor de Electrónica Eugenio Gil colabora desde hace cinco años en el proyecto de Plocan con sus alumnos de Ciclo de Grado Medio y Superior de Telecomunicaciones en el Instituto de Enseñanza Secundaria Amurga (ubicado al sur de Gran Canaria), y explica que “una vez celebrado este encuentro, los robots se lo quedan los centros que han fabricado sus alumnos, y así algunos pueden modificarlo para el año siguiente”.
Gil explica que Plocan les facilita a los centros las instrucciones y un kit básico que permite fabricar tres robots, aunque solo deben presentar uno como mínimo. “Te dan los joystick, los motores, la fuente de alimentación y el cableado, pero nosotros tenemos que comprar tubos de fontanería para poder hacer el armazón del robot, así cada uno puede desarrollar el proyecto a su manera, de un modo personal y añadirle lo que crea conveniente”, concluye.