La portada de mañana
Acceder
Peinado multiplica los frentes del ‘caso Begoña’ sin lograr avances significativos
El miedo “sobrenatural” a que el cáncer vuelva: “Sientes que no consigues atraparlo”
OPINIÓN | 'En el límite', por Antón Losada

Bruselas media en el conflicto del 'Marine I'

La Comisión Europea ha decidido mediar en la problemática de los inmigrantes que viajaban en el buque Marine I hacia Canarias a petición tanto de España como de Mauritania, confirmó este lunes en Bruselas el portavoz de Desarrollo y Ayuda Humanitaria, Amadeu Altafaj.

Al respecto, y según informa ACN Press, Altafaj afirmó que la “Comisión Europea ha sido interpelada por las dos partes” y aseguró que tanto el vicepresidente y responsable de Libertad, Seguridad y Justicia, Franco Frattini, como el comisario europeo de Desarrollo y Ayuda Humanitaria, Louis Michel, han mantenido “contactos” con las autoridades de Nouakchott, como la reunión que este último mantuvo la semana pasada con el presidente mauritano, Ely Ould Mohamed Vall.

El portavoz de Michel calificó la “situación” de “jurídicamente compleja, políticamente compleja y sobre todo humanamente compleja” y subrayó que el “objetivo” es “que las personas sean repatriadas en las mejores condiciones posibles”.

Para lo cual, es necesario proceder a la identificación de lo ocupantes del barco para conocer su país de origen, un procedimiento que “lleva tiempo”, recordó Altafaj quien indicó que incluso en el caso de los subsaharianos es difícil diferenciar entre los inmigrantes económicos y los beneficiarios de asilo.

En cuanto a los inmigrantes de origen subsahariano que debían ser repatriados a sus países de origen tras pasar por Guinea Conakri, el portavoz de Desarrollo y Ayuda Humanitaria de la Comisión Europea reconoció la situación de “incertidunmbre” que vive actualmente este país y destacó que ante todo las personas deben “ser tratadas correctamente”. Un riesgo que no existe en Cabo Verde, añadió.

Junto a Bruselas, también cooperan para resolver esta situación la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) y el Alto Comisionado para los Refugiados de Naciones Unidas (ACNUR). Además, según Amadeu Altafaj, las “autoridades indias”, de donde podrían ser originarios gran parte de las personas que viajaban en el Marine I, “también están en contacto con las mauritanas”.

El portavoz de Desarrollo y Ayuda Humanitaria recordó que “España inserta en una perspectiva europea” las cuestiones relacionadas con las “inmigración clandestina” por lo que es lógico que “en este caso” se recurriera al Ejecutivo comunitario.

No obstante, Altafaj no achacó a la Comisión Europea el hecho de que Nouakchott aceptará finalmente el desembarco de los inmigrantes que viajaban en el Marine I, pero “sí atribuiría” a Bruselas la “actitud más constructiva de las autoridades mauritanas”.

El portavoz de Louis Michel resaltó el “esfuerzo” y la “cooperación” realizada por Mauritania, “un país de tránsito” y “no de origen” de la inmigración que no cuenta con los suficientes medios para vigilar sus “5.000 kilómetros de frontera terrestre” y su “costa”.

Cuestionado por la decisión de conducir el barco a dicho país subsahariano en lugar de a Canarias, donde existen infraestructuras y una mayor experiencia en el caso de la acogida a inmigrantes, el portavoz de Louis Michel indicó que las carácterísticas de la situación aconsejaban tanto por razones humanitarias como “mecánicas” que el Marine I fuera trasladado a puerto lo antes posible.