El Cabildo de Gran Canaria ha acordado trasladar a la Autoridad Portuaria de Las Palmas una propuesta para que las tres rotondas consecutivas que se han creado en la ampliación de la Dársena de África sean denominadas con los nombres de los poetas grancanarios Tomás Morales, Alonso Quesada y Saulo Torón, habida cuenta de la especial vinculación de la obra y biografía de estas tres figuras máximas del Modernismo literario español y de la primera generación lírica canaria con el Puerto de La Luz y el Océano Atlántico.
La petición da curso a la aprobación en el último pleno de la Corporación insular de una moción presentada por Nueva Canarias-Bloque Canarista y PSOE que salió adelante con el apoyo unánime de todos los grupos que integran la Cámara. La iniciativa destacó también la “gran aportación a la literatura, a nuestra historia y a la sociedad canaria en general” de los tres vates isleños.
La moción recalcó, igualmente, que “estos poetas y literatos han inspirado algunos de los textos más destacados que exaltan las cualidades y la vinculación del puerto con la ciudad, con su realidad geográfica, social y su vínculo con las navieras y viajeros de todo el mundo que realizan escala en nuestro recinto portuario, uno de los más destacados del Atlántico y uno de los que han vivido momentos históricos con repercusión mundial”.
Tomás Morales nació en Moya en 1884 y falleció en Las Palmas de Gran Canaria en 1921. Su obra, recogida en las ediciones de ‘Las Rosas de Hércules’ por el Cabildo de Gran Canaria, con motivo del cincuentenario y centenario de su fallecimiento, supone todo canto al mar y a su puerto de La Luz.
Entre sus composiciones destacan el grupo ‘Los puertos, los mares y los hombres de mar’, donde describe el vínculo de la isla y su población con el puerto, como se aprecia cuando evoca que “el mar es como un viejo camarada de infancia” o se refiere al “Puerto de Gran Canaria sobre el sonoro Atlántico”.
En el caso de Alonso Quesada (Las Palmas de Gran Canaria, 1886-1925), también gran parte de su vida estuvo vinculada al Puerto de La Luz, trabajando entre libros de las casas inglesas, primero, en la consignataria Elder Dempster Canary Islands y, luego, en el Bank of British West Africa Limited como jefe de cartera. A partir de abril de 1922, trabajó como oficial encargado de estadística en la Junta de Obras del Puerto de La Luz.
Entre sus publicaciones relacionadas con el Puerto de La Luz destacan ‘El Domingo’, ‘Un tenedor de libros’, ‘Un concierto en la colonia’, ‘El sábado’, ‘Miss Ford’, ‘Un británico’ y ‘La inglesa de la colonia’.
Saulo Torón nació en Telde en 1885 y falleció en la capital insular en 1974. De la mano de su abuelo Montiano Nicolás, que era apoderado de los Depósitos Comerciales, se introdujo en el Puerto de La Luz y durante 56 años estuvo vinculado, hasta su jubilación, al Grupo Miller y Cía. Primero, en la empresa Compañía Carbonera de Las Palmas y más tarde como jefe del departamento de carga de la consignataria Miller.
La obra de Saulo Torón, profunda y filosófica e impregnada en salitre, sobresale en el ‘El arribo de la flota ballenera’, dedicada a Rafael Hernández, y ‘El faro de La Isleta’, que envió a su amigo el pintor Néstor Martín-Fernández de la Torre, autor de los conjuntos pictóricos ‘Poema del Mar’ y ‘Poema de La Tierra’.
Se puede afirmar que la vida de Saulo Torón transcurrió entre el puerto de La Luz, su familia y los encuentros frecuentes con Tomás Morales y Alonso, Quesada formando un trío casi inseparable. Y los tres, cada uno a su manera, fueron poesía luminosa.