Una palmera de grandes dimensiones ha sido talada en Las Palmas de Gran Canaria. El ejemplar se encontraba en Paseo de Chill, junto a dos guarderías y corría el riesgo de caerse y poner en peligro la seguridad.
Según el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, la palmera presentaba una una oquedad bajo la balona que ponía en riesgo su estabilidad, algo de lo que se percató el personal que realiza inspecciones diarias.
La Policía Local anunciaba sobre las 15.00 de la tarde que el Paseo de Chill quedaría cerrado al tráfico comprendido entre Primero de Mayo y Capitán E. López Orduña. Unas tres horas después, el tráfico quedo restablecido en ambos sentidos.