El pasado julio, se aprobaba por unanimidad una moción que proponía la rehabilitación integral del barrio de Jinámar y la puesta en marcha de algunos servicios muy deteriorados. La petición fue trasladada al Cabildo de Gran Canaria y al Gobierno de Canarias, donde también tuvo el respaldo de todas las fuerzas políticas, según informa Nueva Canarias en Telde.
“Ocho meses después, no vemos ninguna actuación en el barrio”, manifiesta en un comunicado la presidencia del partido, Carmen Hernández. El Plan Integral de Jinámar incluía la rehabilitación de los edificios, que según los nacionalistas se encuentran en pésimo estado, sufriendo incluso desprendimientos que suponen un riesgo para los vecinos.
La crítica se extiende a la recuperación del parque infantil, que antaño gozaba de unos toboganes que fueron rellenados con cemento; a la mejora de la cancha deportiva, en la cual hay que incluir el pavimento y el muro perimetral, y al cuidado de los jardines, totalmente abandonados y repletos de suciedad.
Los vecinos de Jinámar han planteado la necesidad de mejorar el acceso a algunos edificios, ya que, en caso de accidente, dificultaría la tarea de los bomberos o de la ambulancia. Además, resaltan la importancia de reabrir la guardería y señalan el elevado número de parados que sufre la localidad como uno de sus principales problemas.
La rehabilitación de Jinámar no solo es competencia del Ayuntamiento de Telde, sino que supera los márgenes de actuación del gobierno municipal. Mientras se depuran responsabilidades y se diseñan líneas de actuación, los vecinos siguen denunciando el estado de abandono al que, aseguran, les someten las instituciones.