La compañía de Antonio de Verónica y Saray Cortés vuelve de gira a Tenerife con un nuevo espectáculo, Por derecho, una representación en la que se refleja el espíritu de los antepasados gitanos, donde tres generaciones muestran su arte, una herencia que forma parte de su vida y que trasladan al baile.
Las actuaciones tendrán lugar el 4 y 5 de febrero en el Teatro Timanfaya de Puerto de la Cruz, a las 20.00 y 21.00 horas, respectivamente, y con entrada a 12 euros. El 6 de febrero, Por derecho se presenta en el Centro Cultural de Adeje, a las 20.30 horas y con entrada a 8 euros.
El 7 de febrero será el Auditorio Municipal de El Sauzal el que acoja este evento, que tendrá lugar a las 21.00 horas y las entradas se pueden adquirir a 7 y 9 euros. La gira tinerfeña finalizará el 14 de febrero en Arona, concretamente en el Auditorio Infanta Leonor de Los Cristianos, que tendrá lugar a las 20.30 horas, con entrada a 10 euros.
“Mientras que en el mundo exista el amor y la desesperación, la nostalgia y el dolor, el sufrimiento y la injusticia, existirá el flamenco por derecho”, aseguran los creadores de este espectáculo en el que, junto a Antonio de Verónica y Saray Cortés, se podrá disfrutar de toda la potencia del baile de La Salinera. A las guitarras se contará con Israel Cortés y Daniel Heredia y la percusión corre a cargo de Juan Utrera.
La compañía flamenca Sánchez Cortés nace en 2005 y desde entonces ha hecho del flamenco más auténtico su seña de identidad, que se transmite a través de cuatro generaciones de una misma familia que van destilando su arte, que en este caso se confunde con su vida, representando los palos más genuinos de este baile ancestral.
Antonio de Verónica se inició en el baile con tan solo siete años y ha compartido escenario con artistas de la talla del bailaor Antonio El Pipa y el cantaor Miguel Flores Quirós, El Capullo de Jerez, y ha aprendido al lado de Rafael Amargo, Rafael del Carmen, Farruco, Farruquito y Juana Amaya.
Saray Cortés, su pareja en el escenario y en la vida, se inicia en el baile con apenas cinco años de la mano de una de las bailaoras más reconocidas, su madre, La Salinera. A los 16 años, esta joven ya está al mando de su propio cuadro de flamenco y llega al teatro Queen Elizabeth de Londres, con unas inmejorables críticas. Ester año ha actuado en el nuevo espectáculo de Farruquito, Sonerías.