El monstruo de la guerra
- Película: Pasaje al amanecer (2017)
- Director: Andreu Castro
- Reparto: Nicolás Coronado, Elvira Mínguez, Lola Herrera, Ruth Díaz, Carles Francino, Antonio Valero, Andrea Duro
El monstruo de la guerra es la piedra angular en la que se basa el primer largometraje del director y guionista Andreu Castro, Pasaje al amanecer. Se centra en destacar por qué una guerra nunca es buena; en ella no hay vencedores y, si los hubiera, no son lo que han combatido en el frente… sino “los poderosos”, como señala uno de los personajes de la cinta.
En esta premisa se apoya la película de Castro, que narra la situación que vive una familia en 2004 cuando el hijo suelta en plena comida de Nochebuena que se va a Irak como reportero gráfico. El motivo de su partida es la necesidad de mostrar al mundo lo que pasa allí, y luego está la angustia del resto de la familia, el dolor… y ese miedo. Es el miedo de unos personajes hacia lo desconocido y de otros hacia sus propios fantasmas de guerras pasadas, que es lo que marca el ritmo de la cinta.
Se trata de un ritmo que a veces resulta lento y cansino, debido en gran medida a un guión algo reiterativo y con afán de poner el acento en frases grandilocuentes y a veces pomposas. Hay un excesivo afán de explicación, constante, sobre la necesidad del protagonista de irse, que se contrapone, casi en la misma medida, a la súplica reiterada de que no se vaya. El guión además intenta tocar demasiadas teclas, ya que, aunque la guerra principal en la que se basa es la de Irak, a su alrededor transitan otras guerras, como la civil española, la segunda mundial o la de los Balcanes. Demasiados conflictos bélicos enclaustrados entre las cuatro paredes de un chalet de la sierra donde vive esa familia acomodada.
Pero es verdad que la película llega al corazón. Llega y te lo retuerce. Y esto se debe, en gran medida, a la banda sonora compuesta y grabada por el tinerfeño Diego Navarro, que, con la colaboración de la Orquesta Sinfónica de Tenerife y del Coro de Voces Blancas de Santa Cruz de Tenerife, consigue que se te clave en el alma la historia, sobre todo en el momento más desgarrador de la cinta.
Y no se puede pasar por alto la gran actuación de las tres actrices protagonistas. Ellas son las verdaderas almas de esta cinta. A las ya veteranas y archiconocidas Lola Herrera (actriz muy vinculada al teatro, conocida sobre todo por su gran interpretación en Cinco horas con Mario y por series de televisión como Un paso adelante o Fuera de lugar) y Elvira Mínguez (Días contados, El guardián invisible, El desconocido), se les une Ruth Díaz, grandísima actriz que hace real y sincero todo lo que toca. Tiene una capacidad innata de convencer y cautivar, como ya lo hizo en su papel de Tarde para la ira. Aquí vuelve a brillar con luz propia en un papel secundario pero con gran peso emocional.
No se puede decir lo mismo del elenco masculino, encabezado por Nicolás Coronado (Demonios tus ojos, Novatos) en el papel del hijo periodista y seguido por Antonio Valero (Amar, El abuelo) en el de su padre. Será Carles Francino (Tengo ganas de ti, Sé quién eres), en el papel de cuñado, el que mejor se desenvuelva en este reparto, pues siempre mantiene un aire distante y correcto.