Comienzan la tareas de demolición del conocido como edificio amarillo del barrio santacrucero de Miraflores

Las máquinas empiezan a derribar el edificio amarillo de la calle Miraflores, este viernes en Santa Cruz

Tenerife Ahora

Santa Cruz de Tenerife —

La primera teniente de alcalde del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, Zaida González, y el concejal de Urbanismo, Carlos Tarife, asistieron este viernes al comienzo de las obras de demolición de la edificación amarilla ubicada en la calle Miraflores, que representaba hasta ahora, debido a su estado de abandono, un foco de insalubridad y una amenaza para la seguridad de viandantes y bienes próximos.

Zaida González afirmó que este derribo “es el mejor símbolo de la política emprendida por el municipio para regenerar la trama urbana de la capital y recuperar y regenerar espacios públicos muy deteriorados desde hace años”, informó Europa Press.

“Primero actuamos en Puerta Canseco, ahora en el edificio amarillo de Miraflores y seguiremos adelante con paso firme para recuperar, restaurar y ofrecer dignidad a un entorno público enclavado en el corazón de la ciudad. No hay marcha atrás. Nos hemos propuesto que el actual entorno de la calle Miraflores sea un recuerdo y emprenda un nuevo futuro urbanístico del que todos podamos sentirnos satisfechos”, dijo.

Carlos Tarife, por su parte, informó de que las obras de demolición del edificio, que ocupa toda una manzana entre las calles Miraflores y la prolongación de Ramón y Cajal, se prolongarán durante tres semanas como máximo, mientras que la limpieza integral del solar se completará en dos o tres meses.

“El derribo va a modificar el entorno tal y como lo conocemos hoy, devolviendo al lugar la dignidad perdida después de años de abandono y mejorando el atractivo de Santa Cruz en una localización céntrica, en la que coexisten bienes de indudable valor patrimonial como el teatro Guimerá, el mercado o el espacio TEA, por citar algunos”, comentó Tarife.

Para Tarife, “no era lógico que un edificio permaneciese ahí en esas condiciones, generando un enorme impacto visual por sus dimensiones, por su estado ruinoso y por el riesgo para la seguridad pública”, afirmó el concejal del Partido Popular.

El concejal dijo que, a diferencia de otros inmuebles de la zona, este edificio “ni se encuentra en el catálogo de inmuebles protegidos ni siquiera el Cabildo considera que tenga valor patrimonial, lo que sin duda ha facilitado el proceso de demolición”.

El coordinador de seguridad de la empresa promotora (Daltre), Cecilio Hernández, indicó que, una vez completadas las obras y retirados los escombros, la cota interior del solar quedará situada a nivel del rasante de la acera en la calle de prolongación de Ramón y Cajal y los cortes del terreno debidamente consolidados, asegurando la estabilidad del viario público en la calle Miraflores.

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